Chainsaw-Man. Puertas

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Sobre la simbología de las puertas en el arte
A partir de ‘El Padrino’ (1972), de Francis Ford Coppola, ‘Monstruos, S. A.’ (2001), de Pixar, ‘Puertas’ (2016), de Paco Arasanz, y ‘Chainsaw Man’ (2018), de Tatsuki Fujimoto

Abrimos este artículo mencionando un objeto: las puertas. Una puerta es un objeto que usamos una y otra vez repetidamente. El fin es el de entrar o salir de un espacio, es un intermedio, un nexo de unión entre un lugar y otro. Durante el día a día abandonamos nuestro hogar por la puerta, dejando de lado el confort para cruzar otras puertas de otros espacios: colegios, museos, supermercados, cines, etc.

Atravesando estos otros espacios, nos adentramos en otros fines: estudiar, trabajar, disfrutar del ocio… ¿A dónde quiero llegar con todas estas obviedades? Lo que pretendo con esta introducción es cerciorar a los lectores del valor simbólico e importancia de estas acciones y objetos, a priori, irrelevantes. Y es que las puertas no son los únicos objetos simbólicos que han sido aprovechados en diferentes medios artísticos: relojes, espejos y demás objetos han tenido su hueco en la historia del arte para dar de sí todas sus posibilidades expresivas. Para esta ocasión, nos vamos a centrar en las puertas.

‘Taula de Sant Miquel’, frontal gótico de finales del siglo XIII procedente de la Iglesia de Sant Miquel de Soriguerola, conservado en el Museo Nacioanl de Arte de Cataluña.

En las diferentes religiones, las puertas han tenido un valor simbólico bastante notorio. Son puertas las que se abren, para la religión cristiana, una vez el difunto accede al cielo. Al igual que en el Antiguo Egipto vemos esta simbología de las puertas durante el viaje de un espíritu en el Duat, teniendo que pasar un determinado número de puertas asociadas al viaje hacia el mundo celestial. Como ejemplo de estas obras, tenemos, asociada a la religión cristiana, la ‘Taula de Sant Miquel’, que muestra una psicostasis y, por parte de la egipcia, la tumba de Amenhotep II en el Valle de los Reyes.

Y, con el transcurrir de los siglos, sigue siendo un tema relevante del que podemos extraer más casos. Asimismo, contamos con ejemplos novedosos gracias, también, a los nuevos medios artísticos, que presentan nuevas posibilidades expresivas, tal y como sucede con el cine, el cómic y los videojuegos. Por ello, presentaremos, a continuación, unos cuantos ejemplos que muestran la simbología de las puertas en estos nuevos medios.

‘El Padrino’ (1972), de Francis Ford Coppola

Iniciamos los ejemplos con un medio artístico bastante popular, el cine, en el que disponemos de un gran número de secuencias bastante significativas respecto a la simbología de las puertas. Como ejemplo paradigmático, el famoso final de ‘El Padrino‘ (1972), obra maestra de Coppola que ya ha cumplido más de 50 años. La escena nos muestra a Michael Corleone junto a su mujer en el despacho de su mansión cuando, de repente, irrumpe su hermana, Connie Corleone.

La hermana comienza a llamarle asesino y reprocha los actos de los que Michael fue responsable y que nosotros, los espectadores, hemos sido testigos de los mismos. Su hermana acaba siendo expulsada y, tras una charla de Michael con su mujer, esta le ofrece tomar algo juntos: es decir, que abandone su espacio de trabajo.

Sin embargo, permanece en su despacho y continúa con sus negocios, de manera que la escena y la película concluye con la reacción de ella en un contraplano en el que le cierran la puerta. La escena habla por sí misma: la puerta cerrada es una metáfora que muestra la negativa de Michael ante el hecho de hablar con su mujer de los crímenes que ha cometido, pues segundos antes le dijo: «No te metas en mis asuntos, no vuelvas a preguntar». Simboliza, por tanto, la falta de conexión y transparencia ya que se oculta detrás de una puerta.

‘Monstruos, S. A.’ (2001), de Pixar

Pixar también nos ofreció otro ejemplo de simbología en su fantástica ‘Monstruos, S. A.’ (2001). En esta ocasión, la historia se centra en una serie de monstruos cuyo trabajo es el de asustar a los niños cuando duermen en sus cuartos para, de esta forma, obtener energía de los sustos. Los monstruos se encuentran en otro mundo totalmente diferente y el nexo que los une son las puertas; en referencia al dicho del monstruo detrás del armario. Puertas que, además, caracterizan a los niños que las habitan.

Como ejemplo tenemos a Boo, la niña humana que mayor relevancia tiene en el largometraje. Su puerta, blanca y con flores, nos deja entrever el carácter inocente e ingenuo que tiene, haciéndose amiga de los monstruos cuyo trabajo es asustarla. Además, durante la secuencia en la que Sulley se enfrenta a Randall, vemos  también ese carácter de conexión entre ambos mundos, con una infinidad de puertas que conectan con habitaciones de niños así como lugares varios del mundo tales como el Himalaya.

‘Puertas’ (2016), de Paco Arasanz

Otro ejemplo lo tenemos con el cortometraje ‘Puertas’ (2016), de Paco Arasanz, cuyo protagonista principal siente placer al profanar puertas. Hábito que adquiere desde su infancia al abrir la puerta de su padre, declarando también de estos objetos que son aquellos que sirven para ocultar los secretos de uno mismo. Y este fetiche no hará más que acrecentarse conforme avance el metraje, profanando puertas de todo tipo de personas sin distinción alguna.

Este camino lo llevará a su perdición cuando intente hacer lo mismo con una puerta sagrada de una iglesia, siendo detenido y encerrado, lo que le hace preguntarse si se trata de una “venganza de las puertas por profanar sus secretos». Toda esta simbología hace referencia a lo que comentamos en la introducción: las puertas son un nexo de unión entre un espacio y otro. Por lo tanto, hay cosas que escondemos al otro lado de la puerta, secretos que se atesoran u ocultan por ser algo vergonzoso y que, en esta película, son profanados por la obsesión de su protagonista.

‘Chainsaw Man’ (2018), de Tatsuki Fujimoto
Puertas

Sin embargo, el cine no es el único medio que juega con la simbología de las puertas. Tenemos otro ejemplo peculiar en ‘Chainsaw Man’, manga publicado por Tatsuki Fujimoto en la Shonen Jump en 2018 y traído a España por Norma Editorial. A lo largo de la obra, se nos introduce una idea que permanecerá ahí durante gran parte del cómic: nuestro protagonista, Denji, tiene un sueño en el que una voz le dice: «Denji… Nunca abras esta puerta».

Así se nos sugiere un misterio el cual tiene que ver con la mente de nuestro protagonista. ¿Qué es lo que hay detrás? No haremos spoiler, pues esto será un elemento relevante para el final. Vemos un uso de las puertas como un mecanismo de la mente para ocultar cierta información, la mente te cierra las puertas de ese recuerdo, te dice que no lo vuelvas a abrir porque lo que haya detrás de esta no será nada bueno y tal vez no quieras saber lo que es. De hecho, el recurso de las puertas es empleado más de una vez en esta obra por lo que tendrán más de un uso.

Y cerramos este artículo reafirmando que el arte permite un lenguaje metafórico para todo tipo de elementos. Con las puertas, hemos podido observar en ejemplos más o menos recientes varios significados: nexos de unión entre mundos, metáforas de cerrar las puertas a tus seres queridos, de ocultar tus secretos y sucesos que tu mente ha querido borrar para que puedas seguir adelante.