Las ‘Hidrografies’ de Pilar Beltrán inundan la galería Cànem

#MAKMAArte
‘Hidrografies’, de Pilar Beltrán Lahoz
Cànem Galería
Antonio Maura 6, Castelló de la Plana
Hasta el 15 de abril de 2023

Nada más abrir la puerta, un olor a jabón de pastilla inunda la galería, transportándonos a los lavaderos de los pueblos donde nuestras madres y abuelas limpiaban la ropa. Nos encontramos en la galería Cànem de Castellón, donde Pilar Beltrán Lahoz inaugura su nueva exposición, ‘Hidrografies’.

Todo gira alrededor del agua: la falta de recursos en los campos de refugiados situados en las fronteras con Europa y –una cuestión más cercana a nosotros– la importancia del agua en el medio rural como “elemento posibilitador de la vida”.

En 2010, el derecho al agua y al saneamiento empezó a formar parte de la Declaración Universal de los Derechos Humanos; solo diez años después, este recurso básico entra en el mercado de valores. La idea de la pieza ‘Proyecto Agua (1×100=1000)’ nace durante pandemia y se materializa en el balcón de casa de la propia artista, reflexionando alrededor de la importancia y los derechos en torno al agua, y situándose en contra de las razones que imperan sobre su mercantilización.

¿Qué sucede cuando no se puede cumplir con la higiene y el distanciamiento social que instan desde las instituciones? Nos trasladamos a la región siria de Idlib, fronteriza con Turquía y, por tanto, zona de paso de refugiados para entrar en Europa. En uno de los proyectos de ayuda humanitaria, unos activistas valencianos empiezan una iniciativa que consiste en la compra y distribución de tanques de 1.000 litros de agua para los campos de refugiados, representados por Pilar Beltrán a través del conjunto de cianotipias que componen la obra y que muestran botellas, vasos, cubos…

La elección de las cianotipias como técnica artística nos muestra la voluntad de la artista de hacerse (y hacernos) a la idea volumétrica de aquellas ingentes cantidades de agua, ya que esta técnica conlleva el uso real de los mismos recipientes representados, consiguiendo así plasmar el peso y el esfuerzo de esta acción. La segunda parte de la exposición, ‘Acto de Conciliación’, está relacionada con el proyecto ‘Confluències‘, una iniciativa del IVAM vertebrada por intervenciones artísticas en los pueblos de la Ruta 99.

En esta iniciativa situada en Villanueva de Viver (Alto Mijares, Castellón), Pilar Beltrán plantea el agua como un elemento que permite la vida. Para ello ubica su instalación en los lavaderos, un espacio histórico de sociabilización entre mujeres en el que aclarar la ropa, pero también los desacuerdos.

Con esta intención, la artista propone un diálogo entre el lavadero del pueblo, las agallas de los robles que forman parte del paisaje natural circundante y unos jabones de pastilla que, a su vez, se relacionan con unos documentos del archivo histórico del Juzgado Municipal, cinco ‘Actos de Conciliación’.

Todo esto queda plasmado en la galería. Podemos ver depositadas en el suelo centenares de pastillas de jabón con la inscripción ‘Acto de Conciliación’, elaboradas en colaboración con la empresa Jabones Pardo (Madrid) que aromatizan la sala. Estas pastillas dialogan con los cinco documentos de ‘Acto de Conciliación’ ubicados en la entrada de la galería y fechados durante los primeros años de la posguerra. Estos están escogidos por su estética y poética, entendiendo el término conciliar como poner de acuerdo a individuos o hacer compatibles ideas opuestas entre sí.

Estos jabones también son utilizados en la pared como una especie de pequeñas estanterías sobre las cuales se encuentran las agallas de roble naturales y representaciones de estas en bronce. Las agallas son presentadas como una metáfora de conciliación natural en la que el grande cuida al pequeño, ya que se crean cuando un insecto deposita sus larvas en un árbol, de manera que el insecto se desarrolla en su interior.

La exposición ‘Hidrografies’ también incluye una proyección de video de la instalación elaborada en los lavaderos de Villanueva de Viver, donde el letrero «ACTO DE CONCILIACIÓN» (escrito al revés) se reflejaba sobre el agua, pudiéndose leer de forma correcta y supeditado al flujo del agua que, de vez en cuando, procura que el reflejo del texto se desdibuje.