‘Picasso Ibero’
Centro Botín
Muelle de Albareda s/n, Paseo de Pereda, Santander
Hasta el 12 de septiembre de 2021
La inspiración es eso que nunca sabes ni cuándo ni dónde te puede llegar a alcanzar. Puede que estés sentado debajo de un árbol y una manzana te caiga en la cabeza, o puede que una tarde decidas entrar en un museo y allí te golpeen las musas con un saco lleno de nuevas ideas.
Eso le ocurrió a Pablo Picasso (1881- 1973) cuando entró en el parisino Museo del Louvre a principios del siglo XX. Allí descubrió el arte ibero –obras excavadas en el litoral mediterráneo y en provincias como Jaén o Albacete, que son fechadas entre los siglos VI y II a.C– que se mostraba en sus salas. El pintor malagueño no pudo detenerse y, al observar aquellas esculturas con sus rostros que se podían dibujar con un mero giro de muñeca y un leve movimiento de dedos, tuvo la necesidad de conocer más acerca de esas obras que tenía ante sus ojos.
En la muestra ‘Picasso Ibero’ que nos presenta el Centro Botín de Santander hasta el próximo 12 de septiembre, se podrá disfrutar de más de 200 piezas del arte ibero de 22 prestadores diferentes (públicos y privados), entre los que están los museos de Jaén, Elche, València, Córdoba, Teruel, Alicante o Albacete. Además, hay obras vistas por Picasso, a principios del siglo pasado, del Louvre y también aportaciones de la familia Picasso, del Museo Picasso de Málaga, del Thyssen-Bornemisza y del Reina Sofía.
Las obras presentadas en el Centro Botín quieren dar algo más que un simple vistazo a las influencias del artista malagueño. La exposición intenta contarnos los años de Picasso bajo el influjo del arte ibero, que le llevó de la época rosa hasta el momento de pintar ‘Las Damas de Avignon’, encendiendo, así, la mecha del cubismo en su vida.
Aunque no solo fue exclusiva la influencia del arte ibero en el cubismo; también deben sumarse otras latitudes y tendencias, como las piezas del románico catalán, las procedentes del continente africano o las del lejano continente de Oceanía. Estas pudieron encontrar su espacio en diversas tendencias de la vanguardia artística, como explicó la comisaria de la exposición, Cécile Godefroy.
Roberto Ontañón Peredo es el comisario asociado de esta muestra en el Centro Botín, aunque tanto él como Godefroy no han estado solos. De este modo, han podido contar con la colaboración de un comité de expertos liderado por el director del comité científico, Pierre Rouillard, y del Museo Nacional Picasso de París, Laurent Le Bo.
La directora ejecutiva, Fátima Sánchez, fue la encargada de dar el pistoletazo de salida a la presentación de ‘Picasso Ibero’, manifestando que «con esta muestra mantenemos nuestra apuesta decidida por investigar y profundizar en aspectos menos conocidos del proceso creativo de un gran maestro del arte moderno, como ya hicimos con las exposiciones anteriores de Joan Miró o Alexander Calder, revelando en este caso la importancia de la historia en su trabajo, lo cual resulta enriquecedor y nos permite observar y disfrutar del arte desde una nueva perspectiva».
La exposición irá acompañada de diferentes actividades que el mismo Centro Botín ofrecerá para que la experiencia de Picasso sea completa. En colaboración con el Instituto Francés, se proyectarán las películas ‘El joven Picasso’ (Reino Unido, 2019); ‘La pisseuse de Picasso avec E Pignon-Ernest’ (Francia, 1991); y ‘Pablo Picasso peintre’ (Francia-España, 1981).
En el apartado ‘Encuentro con…’, diferentes expertos aportarán su punto de vista académico sobre la obra del autor malagueño, para finalizar con una visita libre a la exposición, con el fin de que el espectador pueda disfrutar la muestra bajo otro ángulo. Por otra parte, la bailarina Yolanda G. Sobrado, con la ayuda de Rodrigo Alonso, contestarán a interrogantes tales como: ¿qué sintió Picasso al ver esta obra? ¿Cómo afecto esto a su obra?
Las obras expuestas en las instalaciones del Centro Botín no solo nos permiten conocer una de las grandes influencias de uno de los mayores artistas internacionales de todos los tiempos, como lo fue Picasso, sino que además nos acerca el mundo ibero hasta casi poder tocarlo. Poder respirar el aire del mar Mediterráneo, notando cómo las cinceladas a la fría piedra caliza hacen retumbar nuestros oídos, dando la sensación que las figuras que están ante nosotros nos quieren contar su propia historia y la del resto de objetos.
Picasso Ibero from Makma on Vimeo.
La exposición intenta dar al visitante la oportunidad de conocer cómo este arte influyó en la obra de Picasso, incorporando elementos de un arte antiguo y reutilizarlo para convertirlo en arte moderno. Esto se observa cuando se ven juntas obras del propio artista al lado de sus referentes iberos.
De esta manera, la explicación sin palabras queda dicha tan solo con la imagen que se graba en nuestra retina, y con cada paso que vamos avanzando por la exposición una nueva sorpresa nos depara, como si, obra tras obra, tuviéramos que desenvolver el papel de regalo y aguardar la sorpresa que nos depara en su interior. Solo tenemos que tirar del lazo.
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