Roberto Pugliese

#MAKMAArte
‘Intemperies musicales’, de Roberto Pugliese
Comisario: Pedro Medina
Galería Ana Serratosa
Pascual y Genís 19, València
Hasta febrero de 2023

La Galería Ana Serratosa acoge las ‘Intemperies Musicales‘ del artista napolitano Roberto Pugliese para enseñar una nueva forma de entender el arte sonoro. Una exposición comisariada por Pedro Medina que aspira a crear nuevas relaciones entre el mundo del arte y de la música.

El origen de su título recae en la etimología de la palabra ‘tiempo’. Por un lado, la intemperie, expuesta al tiempo climatológico, negativo de temperies; y, por otro, el tempo en la música, es decir, una duración exacta, una medida cronológica.

Roberto Pugliese se formó en el conservatorio italiano de música electrónica y es uno de los máximos representantes del arte sonoro en su país, en el que le han otorgado numerosos premios. Empezó a estudiar el mundo del sonido a la vez que fijaba su mirada en las artes visuales, hasta que fusionó los dos mundos y así creó un lenguaje propio: una música para ver.

‘Strumenti aumentati (violín)’, de Roberto Pugliese. Imagen cortesía de la galería.

Una singularidad proposicional que realiza tanto a través de la representación gráfica o escultórica que produce un sonido como el recorrido inverso. Es decir, tomar la música como punto de partida para representarla, después, sobre un elemento físico.

Por tanto, las vías de investigación de Pugliese pueden incluir todo aquello que esté relacionado con ambos sentidos: la vista y el oído; una «relación entre el imaginario visual y sonoro, las derivas y las confluencias que caracterizan el mundo contemporáneo”, tal y como perfila el artista.

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‘Intemperies musicales’ se formula, igulamente, a través de un recorrido por diversos espacios pertenecientes a la galería: en los anaqueles de Cabillers 5 acoge una composición de violines alumbrados por una luz cenital tenue. Dicha obra estuvo expuesta anteriormente en una iglesia napolitana y su disposición se corresponde a la puesta en escena de un concierto. Al lado de los instrumentos, un cartel con un código QR permite reproducir una pieza musical original.

“Las vertientes de los sentidos ya mencionados son el punto de partida, pero luego veremos cómo surgen otro tipo de preocupaciones”, explicó el comisario de la exposición, Pedro Medina. “Surge una inmensa preocupación por el medioambiente, principalmente por la deforestación”, ejemplificó.

Para el segundo espacio, situado en Vicente Beltrán Grimal 26, debe abrirse la mirada y agudizar los oídos, pues se trataba de una sala diáfana en la que cuelgan ocho troncos de castaños. En cada una de las piezas se aloja un altavoz que emite sonidos inquietantes, grabados en un bosque cercano.

‘Concerto per natura morta’, de Roberto Pugliese. Imagen cortesía de la galería.

Ruidos agresivos que fueron modulados digitalmente hasta crear sonidos que pudieran ser reproducidos por instrumentos. “No obstante, no se debe entender como música, sino como una experimentación sonora”, explicó Pugliese durante el trayecto inaugural. “Buscaba transmitir el llanto de la naturaleza, preguntándose por qué el ser humano sigue haciendo estas cosas”.

Por último, en el ático de Pascual y Genís 19 aguardan diversos instrumentos con volúmenes escultóricos en la pared, partituras con relieve enmarcadas en un cuadro rectangular y, por último, cinco tubos transparentes llenos de agua que representan el nivel de las mareas de cinco ciudades diferentes.

‘Acoustic Tides’, de Roberto Pugliese. Imagen cortesía de la galería.

Una obra, íntimamente relacionada con la conciencia medioambiental del artista, que representa el calentamiento global y cuyo paisaje sonoro «permite enfatizar y acercar los problemas de la naturaleza”, matizó Pedro Medina.

En tanto que, durante la observación de la obra acuática, se puede escuchar la melodía de cada lugar conectada directamente con su propia estación meteorológica, el empleo de máscaras de frecuencia reporta un sonido único para cada estación, eludiendo la monotonía. “Al final, escuchamos prácticamente un canto de sirena hipnótico”, concluyó el artista.