Ornamento y delito, de Luis Úrculo
Espai Tactel
C/ Denia, 25. Valencia
Inauguración: viernes 6 de mayo, a las 20.00h
Hasta el 17 de junio de 2016

«Los astrólogos tienen encuentros secretos dentro de un cuarto del emperador como panal de miel donde construyen sucesos anticipados al futuro…» (Tristan Tzara)
‘Ornamento & delito’ de Luis Úrculo es un ambiguo acuerdo de contrarios, una disección de algunas ideas desarrolladas por Adolf Loos en el ensayo del mismo título, para ser convertidas en conceptos más flexibles, es decir, fieles y en réplica a los postulados del arquitecto vienés. Loos invita a deshacerse del ornamento (elemento que considera un freno a la evolución, pues no es expresión de nuestra cultura), y a preocuparse por las cualidades de los nuevos materiales.

Lo que realmente señala el arquitecto en su texto es que el delito no es tanto del ornamento, como del hombre que no usa su capacidad para confeccionar nuevos adornos. Se trata de un eje estratégico que convierte a  Loos en un continuador de la senda iniciada por el clasicismo postbarroco de Ledoux o Schinkel, y que desemboca en el racionalismo arquitectónico.

Obra de Luis Úrculo. Imagen cortesía de Espai Tactel.
Obra de Luis Úrculo. Imagen cortesía de Espai Tactel.

Luis Úrculo presenta una antítesis que enlaza con la lista de contradicciones vertidas en algunos escritos y proyectos que Loos nos ha legado (recordemos cómo se adaptó a las necesidades de Tristan Tzara, un poeta diametralmente opuesto al racionalismo, cuando este le encarga su residencia francesa). Una reflexión sobre lo decorativo que contribuye, como otros trabajos del artista, a un mejor conocimiento de lo doméstico-arquitectónico.

Estamos ante una propuesta expositiva que continúa el proceso de registro del comportamiento de los materiales, iniciado con Reconstructions (2015) y en el que  Úrculo prescinde del cuerpo (de aquellas manos anónimas que coprotagonizaban el vídeo) para concentrarse, citando a Heidegger, en lo “cósico”. La exploración del potencial de lo imperceptible-cotidiano, se lleva ahora a cabo a través de unos fragmentos ficticios que reproducen las tramas abstractas presentes en un material arquitectónico real, cuyo proceso de obtención, a veces, también es fingido.

Obra de Luis Úrculo. Imagen cortesía de Espai Tactel.
Obra de Luis Úrculo. Imagen cortesía de Espai Tactel.

El artista acude de nuevo a la variedad de formas artísticas. Haciendo uso del dibujo (tengamos en cuenta que el arquitecto vienés se oponía a imitar mediante una tintura el material subyacente), o la fotografía (recordemos que Loos cuestionó la capacidad de este medio para representar la arquitectura, pues consideraba que los inquilinos no podían reconocer sus casas cuando las veían fotografiadas), Luis Úrculo crea un enviroment con el que anula la “alternancia wölffliniana” en favor de la coincidencia entre lo “clásico” (homenajeando la preocupación de Loos por las cualidades del material), y lo “barroco” (a través de la filiación romántica del paisaje presente en la abstracción).

‘Ornamento & delito’ supone una paradójica contribución a los estudios que desde el siglo XVIII, se han llevado a cabo sobre los comportamientos del adorno. Una investigación que propone la huida del ornamento (el freno a la evolución según Adolf Loos), como regreso a lo decorativo.

Obra de Luis Úrculo. Imagen cortesía de Espai Tactel.
Obra de Luis Úrculo. Imagen cortesía de Espai Tactel.

Francisco Ramallo