Valparaíso. Manuel Valls

#MAKMAEscena
‘Valparaíso’, de Manuel Valls
Dirección: Rafa Calatayud
Intérpretes: Marta Chiner y Manuel Valls
Producción: Dacsa Produccions y La Penúltima Teatre
Teatre Rialto
Plaza del Ayuntamiento 17, València
6 al 9 de junio de 2024

El dramaturgo, actor y director de escena valenciano Manuel Valls recuerda con cariño y añoranza las sesiones de cine clásico que disfrutaba con su abuela. ‘El año que viene a la misma hora’ (1978), de Robert Mulligan, es de los largometrajes del pasado siglo que se quedó grabado en su mente.

Se trata de una adaptación cinematográfica de la obra homónima del dramaturgo canadiense Bernard Slade, que relata la historia de una pareja que, a lo largo de muchos años, celebra un encuentro anual que sirve de pretexto para dar cuenta de los principales acontecimientos vividos tanto por ellos como por su país.

Alan Alda y Ellen Burstyn interpretaban a los dos amantes que, desde 1951 hasta 1977, mantienen una relación puntual y guadiánica que abarca varias décadas de la historia de Estados Unidos. Un trato que no les obliga a renunciar a sus respectivas familias, sino al contrario, a integrarlas. La historia de una relación singular, de una época concreta y de un país.

«La idea de esta relación esporádica, pero muy fiel a lo largo del tiempo, siempre me ha parecido maravillosa y deseaba llevarla a mi propio terreno», confiesa Manuel Valls. Así surgió ‘Valparaíso’, el montaje que se estrena en el Teatre Rialto esta semana, producido por La Penùltima y Dacsa Produccions. Un texto suyo dirigido por Rafael Calatayud e interpretado por Marta Chiner y el propio Valls.

Valparaíso. Manuel Valls. Teatre Rialto

Los protagonistas son Clara y Alberto, una enfermera de ideas progresistas y un editor de mentalidad conservadora. En los albores de la democracia española –1978, el mismo año en que se estrenó el filme de Mulligan–, coinciden en el hotel Valparaíso, enclavado en la sierra de Irta, territorio neutral, pues ella es de València y él de Alicante.

Pese a sus diferencias ideológicas, surge entre ellos un cordial y profundo entendimiento que les lleva a organizar un encuentro semanal a lo largo de los siguientes años. Siempre en el mismo lugar, el Valparaíso, y en el mes de febrero. Como dos líneas paralelas que transgreden eventualmente las leyes de la geometría para cruzarse. «No es la típica historia de cuernos, sino algo más profundo», apunta Valls.

«Dos personas con sus propias vidas y sus propias familias que sin tener prácticamente nada en común deciden quedar todos los años para pasar unos días juntos, y así durante nada menos que treinta y seís. Una relación que necesitan y significa para ellos una especie de bocanada de aire fresco. Con Clara y Alberto, recorremos la historia de un país desde una incipiente democracia, hasta los inicios del siglo XXI, contada a través de su visión personal, la de dos personas ideológicamente antagónicas pero que son capaces de amarse, incluso de entenderse».

En tiempos de crispación política en los que «nos obligan a ser hooligans de uno u otro partido y la gente vota no a favor de uno, sino al que considera menos malo», Valls retoma los mimbres del cine clásico para contar una de esas historias que tocan la fibra sensible y te hacen sentir bien. «Una historia de corte clásico que a mi abuela le hubiera gustado ver», afirma, porque «cuando todo lo que está ahí fuera son guerras, desastres, desencuentros, gracias a Clara y Alberto volvemos a confiar en las personas».

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Es la primera vez que Valls trabaja con el veterano Rafa Calatayud y está encantadísimo de la experiencia. «Rafa es un monstruo de la escena», afirma. «En el primer ensayo ya tenía toda la obra en la cabeza y sabía cómo debíamos hablar los actores. Tiene un don especial para la comedia y para sacar brillo al texto».

Una de las aportaciones de Calatayud se refiere al vestuario, ya que los intérpretes, para reflejar el paso de los años, usan ropa cada vez más holgada que da la falsa impresión de que menguan de tamaño. Las fotografías que se proyectan en el escenario sirven para evocar los acontecimientos históricos que se citan.

En resumen, ‘Valparaíso’ es una comedia dramática, dirigida con pulso milimétrico por Calatayud, que sabe imprimir un característico tempo de comedia absurda a sus trabajos y combinarlos genialmente con los momentos dramáticos. Una historia en la que lo que importa es la relación que establecen las personas cuando dejan todos los conflictos de lado y, simplemente, se escuchan.

La larga relación de compañerismo y amistad que existe entre Chiner y Valls –se conocen desde los 20 años– contribuye a la perfecta química que fluye en la pareja. La iluminación es de Ximo Olcina y la escenografía de Luis Crespo y Natalia Suescum, el mismo equipo de ‘La mujer más fea del mundo’, anterior montaje de Dacsa Produccions y La Penùltima Teatre, nominado a los premios Arts Escèniques 2023 (a mejor espectáculo y dirección) y a mejor texto dramático por la crítica valenciana.