Graners de Creació

Graners de Creació 2022
Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC)
Residentes 2022: La Lola Boreal, Taninna Teatre y Gota Fría, Nerval, Caterva Teatre, Javier Hedrosa, Arritmados, Dacsa Produccions, Alberto Cortés, Paula Serrano, Ladyfunta, Sadra Gómez, Teatro Corrent, Migrats Dansa 2022, Invernadero de Russafa Escènica, Site Specific de Festival 10 Sentidos y Rambleta

Graners de Creació, el proyecto de residencias artísticas que comandan Jacobo Pallarés y Maribel Bayona, sigue su curso en medio de la pandemia y, ahora, en medio del enfrentamiento entre profesionales del sector de las artes escénicas y el Institut Valencià de Cultura (IVC) por la mala gestión de las ayudas del instituto público. Graners de Creació se erige, fiel a su espíritu, como ejemplo del rumbo que, a su juicio, debe tomar la Generalitat con respecto a un sector teatral tan “frágil” (Bayona).

“El problema es mucho más complejo que centrarlo en una sola persona”, subrayó Pallarés, aludiendo a esa petición de dimisión de Abel Guarinos, director general del IVC, solicitado por algunas asociaciones. “Lo que estamos pidiendo desde las asociaciones es un cambio de paradigma urgente, porque la precariedad se está anquilosando ya en el sector”, añadió quien ofrece como referencia el propio Graners de Creació, donde desde hace ya tres años vienen fomentando las residencias artísticas como espacio de fomento del proceso creativo, un aspecto fundamental generalmente descuidado por la Administración pública.

De izda a dcha., Elisa Matallín, Laura Pastor, José Luis Pérez Pont, Jacobo Pallarés y Maribel Bayona, durante la presentación de Graners de Creació. Imagen cortesía del Centre del Carme.

“Hay muy buenas intenciones, mucha sensibilidad, pero sin que se tomen decisiones de calado, que es lo que pedimos desde Espacio Inestable y desde Fetid [Federación de Empresas de Teatro Independiente], para que haya un cambio radical de todo el ecosistema teatral”, resaltó Pallarés. A su juicio, no es un problema únicamente de las ayudas públicas mal gestionadas, sino de poner el foco en los procesos de creación de los artistas, más allá del impulso tan solo del resultado final.

“Todo el sistema administrativo está encaminado a ese momento último de la producción, mientras que nosotros lo que proponemos es que se cuide al creador de una manera más clara y decidida. De ahí la insistencia en solicitar un cambio de paradigma”, apuntó el responsable de Espacio Inestable junto a Bayona, quien sintetizó el problema mediante una proclama: “Pedimos a gritos ese cambio de paradigma”.

Jacobo Pallarés, en el marco de la presentación de los residentes 2022 de Graners de Creació, leyó una suerte de manifiesto, revelador del espíritu que anima al proyecto y, sin duda, extensible a esa colaboración con los organismos públicos, y que arrancó así: “En estos tiempos tan convulsos toca tener un compromiso político con los creativos, sus estructuras, sus pensamientos, sus energías, deseos y expectativas. Toca cuidar y ser cuidadoso”, dijo, con esos creadores que, en el fondo, son las mentes de la sociedad, dando la posibilidad a ésta de “ponerse en otros lugares y salir del confort al ser más críticos”.

Caterva Teatre, uno de los residentes 2022 de Graners de Creació, en la imagen con el espectáculo ‘L’Home de Bo’.

De hecho, Graners de Creació nació, según apostilló Pallarés, hace cuatro años con la finalidad de apoyar a los creadores en sus “momentos más complejos y potentes”, como son los de la creación, dándoles apoyo tanto económico como estructural. Una de las novedades de este año es la creación de líneas de acompañamiento y asesoramiento para los 34 artistas y compañías que componen el proyecto.

Un proyecto apoyado por seis espacios privados, que Pallarés quiso subrayar: Sala Russafa, La Rambleta, Teatro Círculo, Sala Off, Teatre del Raval y Espacio Inestable. Al igual que los tres festivales valencianos que igualmente lo integran: 10 Sentidos, Circuito Bucles y Russafa Escènica. Y cuatro espacios públicos: El Musical, La Mutant, Paranimf de la UJI de Castellón y Casa de Cultura de Bellreguard, sin olvidar al Centre del Carme que desde un principio les dio su apoyo.

Después de resaltar las fortalezas de Graners de Creació, Jacobo Pallarés volvió a insistir en la importancia del apoyo de las instituciones públicas a los procesos creativos, más allá del que se brinda a la exhibición final de la obra ya realizada. “Solicitamos el apoyo de las Administraciones locales y autonómicas a las residencias para que las incorporen decididamente en sus políticas culturales, con recursos económicos y estructurales”, destacando la singularidad de Graners, “tanto en la Comunitat Valenciana como en el resto del Estado”.

Arritmados, compañía residente 2022 de Graners de Creació.

Los 34 creadores implicados en estas residencias artísticas, trabajando dos proyectos en cuatro años, reciben apoyo económico para desarrollar sus creaciones y un acompañamiento que consiste en labores de asesoría y mediación, de la que se encargan Elisa Matallín y Laura Pastor. “Le damos mucha importancia al proceso creativo y lo hacemos desde la cercanía y la mediación con la comunidad interesada en la pieza, ya sea por proximidad o temática”, señaló Matallín.

Graners de Creació ha establecido, además, ‘Conexiones’ (tal y como se denomina el nuevo apartado) con otras instituciones de dentro y fuera de la Comunitat Valenciana, para fortalecer el proyecto. Nau Ivanow y Tantarantana (Barcelona), y La Granja de Burjassot (Valencia), son algunos de los primeros centros conectados a la red procesual de Graners. Proceso creativo para el que Pallarés y Bayona hicieron un llamamiento de cara al apoyo de las instituciones públicas, ahora cuestionadas a través del IVC, al que reclaman un cambio de paradigma que venga, de una vez por todas, a paliar el frágil ecosistema de las artes escénicas.

La Lola Boreal, seleccionada para las residencias 2022 de Graners de Creació, en la imagen con su espectáculo ‘Marrr’.

Salva Torres