Espejos. CaixaForum València. Exposiciones

#MAKMAArte
La evolución de las exposiciones: de la contemplación a la participación
MAKMA ISSUE #08 | Entornos Museográficos
MAKMA, Revista de Artes Visuales y Cultura Contemporánea, 2025

En los últimos años, el mundo de las exposiciones temporales ha experimentado una transformación profunda. Originalmente concebidas como espacios de contemplación y transmisión directa de conocimiento, estas exposiciones surgían, a menudo, como productos cerrados en los que el público asumía un papel pasivo, limitado a observar y absorber el contenido diseñado por unos equipos curatoriales.

Esta perspectiva respondía a un modelo de transmisión unidireccional del conocimiento, donde las instituciones presentaban su saber a una audiencia que asistía para observar y admirar. Sin embargo, con el tiempo, esta estructura ha empezado a mostrar ciertas limitaciones, sobre todo cuando se trata de exposiciones que pretenden contar historias complejas, y requieren de un público conectado y activo.

Aquí es donde surge la necesidad de crear una capa adicional en las exposiciones que permita conectar con el público. Esta idea está transformando el enfoque de las exposiciones desde las instituciones culturales. Los museos y centros expositivos se están dando cuenta de que el espectador contemporáneo ya no se conforma únicamente con recibir información de manera pasiva; el público busca experimentar, interpretar y participar.

La exposición se transforma, así, en un diálogo, una plataforma de intercambio donde el visitante no solo observa, sino que también contribuye, reflexiona y se convierte en una parte esencial de la narrativa que se desarrolla.

Portada de ‘Entornos Museográficos’ | MAKMA ISSUE #08, diseñada por José Antonio Campoy.
La experiencia inmersiva y el diálogo con el público

Para lograr esta transformación, desde los centros culturales estamos construyendo narrativas más completas que invitan al visitante a formar parte de un viaje intelectual y emocional. Por ejemplo, a través del diseño escenográfico e inmersivo, las experiencias sensoriales o los elementos táctiles; los espacios de cocreación del público, donde los visitantes pueden dejar sus reflexiones, opiniones o, incluso, aportar a obras colectivas. También a través de la mediación activa y personalizada: los mediadores fomentan la participación del público, haciéndolo reflexionar con preguntas, planteamientos y actividades relacionadas con la exposición.

La participación como herramienta de transmisión de conocimiento

Esta implicación del público se ha convertido en un elemento esencial de las exposiciones en la actualidad. Está demostrado que la participación no solo mejora la experiencia del visitante, sino que también enriquece el proceso de aprendizaje y reflexión. A través de herramientas interactivas, preguntas abiertas y espacios de debate, las exposiciones se convierten en lugares donde el público tiene la oportunidad de expresar su voz y contribuir a la construcción de significados. Este enfoque se basa en la idea de que la transmisión de conocimiento no es una acción pasiva; es una experiencia colaborativa, donde el conocimiento fluye en ambas direcciones.

En este modelo, el público es un agente activo que aporta sus propias interpretaciones y emociones, dando lugar a un proceso de aprendizaje mutuo. Los equipos de exposiciones trabajan con el objetivo de que el visitante experimente una conexión real con los temas y objetos expuestos, que se sienta parte de un diálogo continuo sobre cuestiones que son relevantes para él y su entorno.

El enfoque de la mediación activa desde CaixaForum València

La programación de CaixaForum València está pensada desde esta perspectiva. Este año, las temáticas propuestas invitan al visitante a explorar y reflexionar sobre temas que conectan de un modo u otro con la sociedad. 

Por ejemplo, ‘Espejos. Dentro y fuera de la realidad’, una exposición en la que los espejos son el objeto museográfico a través del cual, de forma totalmente interactiva, se pone de manifiesto la importancia del papel que desempeñan en diferentes ámbitos de la ciencia, de la cultura y de la vida en general. 

‘Arte y naturaleza’ repasa un siglo de fascinación del arte hacia la naturaleza e invita a los visitantes, por un lado, a leer las obras de arte desde una perspectiva científica y, por otro, a mirar la naturaleza como artistas. 

Top Secret. Cine y espionaje’ permite al visitante comparar la representación ficticia con la realidad histórica, comprendiendo cómo el cine ha reflejado tensiones geopolíticas y culturales. Pero también propone una reflexión sobre qué podemos considerar espionaje hoy en día.

Por otro lado, ‘Veneradas y temidas’, una exposición sobre la representación femenina en el arte y las creencias, fomenta un espacio de diálogo donde los visitantes pueden reflexionar sobre la vigencia de algunos de los atributos femeninos de diosas y seres espirituales. 

Finalmente, ‘[REC]UERDOS,’ una muestra sobre cine doméstico, desde las cámaras Super 8 hasta la popularización de plataformas como TikTok, invita a reflexionar sobre cómo la tecnología y el registro de la vida cotidiana influyen en la percepción de la sociedad y en la construcción de la memoria colectiva en la cultura de este país.

Estas propuestas no solo buscan informar, sino también transformar la experiencia del visitante, convirtiéndolo en un protagonista activo de la exposición. A través de esta participación, los centros expositivos no solo cumplen una función educativa, sino que también inspiran un cambio de perspectiva, logrando que cada visita se convierta en una experiencia de aprendizaje profundo y compartido.

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