Desengaño, de Folkert de Jong
Atelier Familial, de Delphine Courtillot
Galería Luis Adelantado
C / Bonaire, 6. Valencia
Hasta el 4 de julio

Para la segunda exposición individual del artista holandés Folkert de Jong titulada ‘Desengaño’, De Jong muestra en primicia, su incursión en la cerámica y también algunas esculturas híbridas en madera tallada y bajo relieves. Folkert de Jong es bien conocido por su teatrales y narrativas recreaciones escultóricas que abordan temas como la guerra, la codicia y el poder tanto en la historia de la humanidad como en el presente.

La palabra desengaño en el contexto de la historia significa desilusión o un profundo sentido de transitoriedad, que normalmente es experimentado después del colapso o el declive de los imperios. Sabiendo que eventualmente siempre hay un renacimiento del arte y la literatura después de cada colapso de un sistema de poder, De Jong ve este tema como un punto de partida positivo para el concepto de su exposición.

Obras de Folkert de Jong en la exposición 'Desengaño'. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.
Obras de Folkert de Jong en la exposición ‘Desengaño’. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.

Tras la relectura del conocido ensayo de Walter Benjamin ‘La obra de arte en la época de la reproductividad técnica’ de 1936, De Jong se acerca de nuevo a temas como la autenticidad, la reproductividad, la singularidad, la originalidad y el valor del arte. Benjamin identifica “el aura” de la obra de arte con la singularidad, con la experiencia de lo irrepetible y analiza cómo la reproducción técnica destruye dicha ‘originalidad’.

Las esculturas de cerámica y las planchas de madera grabadas nos remiten a las formas y técnicas artísticas más tradicionales. Ásperas y descarnadas como los materiales a los que se acerca, las piezas de De Jong encarnan un horror grotesco y un humor macabro que podría recordar a la obra de los artistas europeos del siglo XX como Georges Grosz y James Ensor.

Obras de Folkert de Jong y Delphine Courtillot. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.
Obras de Folkert de Jong y Delphine Courtillot. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.

La pieza central de la exposición, que preside la entrada de la galería, es la réplica del trono de la coronación de la familia real británica embadurnada de graffitis. La famosa silla que todavía se utiliza para la coronación de los reyes ingleses, mandada hacer por el rey Eduardo I en torno a 1296 para albergar la Piedra del Destino que fue usada, desde el siglo IX hasta el siglo XIV, para coronar a todos los reyes de Escocia. Con esta obra Folkert de Jong nos habla de la idea de fetiche, de ritual, del valor del patrimonio y en última instancia de la materialización del poder político encarnado en un objeto de arte.

Otra interesante aportación en la exposición es la colaboración con su esposa, la artista Delphine Courtillot. En esta línea de trabajos que recupera la utopía de las vanguardias artísticas, de una renovada búsqueda y sensación positiva en la colaboración entre las distintas disciplinas artísticas y artesanales, han creado juntos una serie de lámparas de sobremesa hechas de cerámica y telas pintadas a mano.

Obra de Folkert de Jong. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.
Obra de Folkert de Jong. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.

El nuevo proyecto de Delphine Courtillot ‘Atelier Familial’ (Estudio familiar) es un proyecto utópico de un espacio creativo donde una familia simbólica invita a espíritus afines a unir fuerzas y revisar el campo de las artes aplicadas. En una era donde casi todo es manufacturado en China ‘Atelier Familial’ está ahí para inspirar a la gente a que haga suya la creación de los objetos de su vida cotidiana.

Nacido de la fascinación por los movimientos artísticos de principios del siglo XX desde el Art Nouveau, pasando por la Bauhaus y los talleres Omega con su constante dedicación a fundir los límites existente entre lo decorativo y las Bellas Artes, ‘Atelier Familial’ nos habla también sobre el idealismo de colaboración, contra la soledad del trabajo individual en el estudio, sobre experimentar con técnicas asociadas a la artesanía con la intención de crear objetos artísticos, que sean a la vez juguetonas e inventivas soluciones a los problemas de las restricciones técnicas, asociadas con el diseño de cosas que deben ser usables.

Obras de Delphine Courtillot en la exposición 'Atelier familial'. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.
Obras de Delphine Courtillot en la exposición ‘Atelier familial’. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.

La primera exposición de objetos producida en ‘Atelier Familial’ se concentra en vestidos y collares inspirados por el taller Omega y la ropa avant-garde creada por las artistas Sonia Delaunay y Sophie Taueber-Arp (y también lámparas creadas en colaboración con Folkert de Jong).

Usando una forma básica prestada de la tradicional ropa guatemalteca y mexicana, un cuadrado o rectángulo con aberturas para la cabeza y los brazos, y motivos directamente pintados en el textil (tela/lienzo), la confección de las túnicas y los vestidos es la forma menos complicada imaginable de crear una pieza de ropa. Con el mismo planteamiento básico, muchos de los abalorios necesarios para crear los collares están hechos de barro seco pintado. Ropa y joyas son expuestas en la galería como si desafiaran su estatus funcional y recuperaran, en ese sentido, su estatus de pinturas, tapetes y esculturas en miniatura.

Obra de Folkert de Jong. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.
Obra de Folkert de Jong. Imagen cortesía de la galería Luis Adelantado.