MAKMAEscena | Ciclo de charlas-coloquio «En primera persona»
Cesc Gelabert: «Bailar en el museo»
Sala San Miguel de la Fundació Caixa Castelló
Enmedio, 17. Castellón
Jueves, 19 de mayo, 19.30 horas

El pasado 19 de mayo tuvo lugar el espectáculo de danza contemporánea “Bailar en el museo” en la sala San Miguel de Castellón de la Plana, organizado por la Fundació Caixa Castelló. Aquí el reconocido bailarín y coreógrafo Cesc Gelabert interpretó dos bailes al ritmo de “Preludi” compuesta por Frederic Mompou y “Bujaraloz by Night” de Carles Santos.

La forma tan única en la que el bailarín articuló el lenguaje de esas danzas consiguió hacer a los presentes testigos de la existencia de un universo totalmente diferente, y separado del nuestro por un muro invisible, que existió tan sólo durante esos minutos en el escenario.

Unas veces con la rigidez de una marioneta y otras con la fluidez de un animal marino, Cesc dibujó poco a poco un mundo onírico con su movimiento en el que las leyes del lenguaje y los límites de la carne dejaron de tener sentido. Representando una danza cargada de melancolía nos recordó la fragilidad del ser, para acabar con una nota alegre al dibujar una sonrisa en su propia cara.

Cuando el sonido de los aplausos nos consiguió devolver al mundo real comenzó un coloquio con la intención de articular en palabras lo que habíamos experimentado. En esta conversación entre Cesc Gelabert y el gestor cultural de la Fundació Caixa Castelló, Alfredo Llopico, se tocaron temas como el estado de la cultura en nuestra era y la importancia de la danza, a la vez que se repasó la carrera profesional del bailarín a través de distintas anécdotas sobre sus obras en distintos países y las personalidades con las que ha colaborado a lo largo de los años.

Cesc Gelabert durante el evento. Imagen cortesía de Fundació Caixa Castelló.

También se habló sobre la espiritualidad del propio artista, que se considera budista, y nos hizo comprender cómo este es un aspecto clave en su obra al asegurar que “en la danza entran en un juego de equilibrio el cuerpo, la mente y el espíritu”.

Las palabras de Cesc fueron especialmente reveladoras a la hora de ayudarnos a entender su propia concepción del arte y la cultura cuando afirmó que “el arte no existe sin el público” y que “yo no importo, importa la cultura que sale de mí […] porque sin cultura no nos podemos comunicar”. Al hablar sobre la danza, la calificó de arte efímero al existir sólo en el momento de realizarla y recalcó la importancia del público al afirmar que “una obra en un escenario es faena de todos”.

Al decir esto no solo hablaba de la importancia de la performance en sí, sino que fue un poco más allá y se refirió al propio significado de la danza como “un sueño que se comparte en vigilia con el público” profundizando un poco más y declarando que “el arte lo hace el público al convertirme en sujeto de sus sueños”.

Cuando llegó la ronda de preguntas del público empezaron a surgir cuestiones existenciales, que Cesc resolvió con una magnífica frase que bien podría aplicarse a cualquier forma de arte: “la danza no da sentido a la vida, pero es una herramienta”.

Cesc Gelabert inicia estudios de danza con Anna Maleras, incorporándose a su grupo en 1969. Su primera creación coreográfica data de 1972 y desde entonces y hasta el momento, ha desarrollado Gelabert una contundente trayectoria. Se le reclama en importantes compañías y su repertorio artístico se extiende hasta nombres como el de Mikhail Baryshnikov, para quien creó el solo In a landscape en 2003, además de David Hughes, Balletto di Toscana, Tanztheater Komische Oper, Ballet Gulbenkian, Larumbe Danza, Kukai o Hermès.

Entre otros galardones Cesc Gelabert ha recibido el Premi Nacional de Dansa de Catalunya, Medalla de Oro de las Artes Escénicas, Premi Ciutat de Barcelona, Premio Nacional de Danza del Ministerio de Cultura, Premios Max, The Herald 2004 Angel Award, Premi Butaca, Aisge-Actúa y Medalla de Oro al Mérito Cultural 2020 del Ayuntamiento de Barcelona, entre otros.