#MAKMAArte
‘Transcódigos’, de María Aranguren
‘Un espacio de tránsito’, de Oliver Roura
Colabora: Juan Bautista Peiró
Abierto Valencia 2025
Shiras Galería
Vilaragut 3, València
Hasta el 13 de noviembre de 2025
Decía Oscar Wilde, en su novela ‘El retrato de Dorian Gray’, que definir es limitar. Acotar el ser a la expectación, no ir más allá. Ver molinos donde hay molinos y dejar de lado la posibilidad de vislumbrar gigantes.
Es precisamente con este ejercicio de reinterpretación que María Aranguren arranca su obra ‘Transcódigos’ en Shiras Galería. En ella le da una vuelta a la función del policarbonato celular, un material usado en construcción que une dos placas de plástico translúcido mediante nervios que dejan celdas huecas entre ambas láminas.
Con esta relectura, Aranguren arrebata la sensación de rigidez a este material que a priori se concibe insípido, da un paso de lo formal a lo poético. En su nuevo proyecto trabaja con el concepto de código. Código como resultado de la combinación de símbolos, igual que ocurre en la lengua.

La artista crea su propio idioma a través de unas obras en las que no solo se centra en el mensaje que transmite, sino también en la forma en la que este se construye. El crítico Juan Bautista Peiró, que colabora en esta exposición, anota que “es en esa fusión inseparable de forma y contenido donde la obra trasciende la comunicación ordinaria y se convierte en experiencia estética”.
La sala principal de Shiras Galería acoge este nuevo proyecto que recibe por nombre ‘Transcódigos’. De manera que, con el prefijo trans, Aranguren busca subrayar su intención de ir más allá; más allá del código, del lenguaje y del propio mensaje. La muestra, que estará disponible hasta el 13 de noviembre, se presentó en Abierto Valencia 2025 y recibió dos Premios Adquisición, uno de ellos otorgados por MAKMA a su obra ‘Código 6’.
Las últimas piezas de la artista sintetizan el trabajo que viene haciendo estas últimas décadas: “Ha alcanzado una claridad que no renuncia a la ambigüedad poética, un equilibrio en el que conviven estructura y apertura, precisión formal y vibración sensorial”, aporta Bautista Peiró.
‘Transcódigos’ se enmarca en un proceso de evolución de la artista, en el que la propia pintora apunta que ha ido “aligerando tanto en forma como en fondo”. Aranguren comenta que en esta muestra se ha despojado de la densidad que caracterizaba a sus anteriores obras; ahora sigue trabajando su expresión pictórica, pero apoyada en los pilares de la transparencia, el color, la composición y la tridimensionalidad.
A la hora de explicar cómo crea sus obras, María Aranguren cuenta que sus cuadros tienen que bailarse. Para hacer que la pintura se desplace a lo largo de los huecos, la artista se balancea con el soporte rompiendo su rigidez con el azar. El resultado del baile es el mensaje que el espectador puede leer, escrito en un idioma que nace de la danza y que va más allá de la misma. Que no encuentra límites porque no se define y que, en definitiva, no deja al espectador indiferente.

A este abandono de la rigidez también se suma Oliver Roura, quien en su proyecto ‘Un espacio de tránsito’ busca capturar la iridiscencia, el efecto óptico que hace que en una misma superficie puedan verse distintos colores, como ocurre con el nácar o con las pompas de jabón. El espacio Refugio de Shiras Galería cuelga en sus paredes la interpretación que Roura ha hecho de este espejismo.
La iridiscencia casa con lo curvo, lo susceptible al cambio, lo maleable; por eso alguna de estas obras no tienen soporte. Son una piel acrílica que con las capas de pintura metalizada y las fallas que dejan las cerdas del pincel consiguen el efecto que se busca.
La forma en la que se percibe la obra no depende solo de la misma, sino también de la disposición que adopte quien la vea. Según la manera en que se mire, la pieza cambia, convirtiendo al espectador en sujeto activo y dotando de unicidad a la experiencia.
- Dejar de lado la rigidez: María Aranguren y Oliver Roura en Shiras Galería - 3 noviembre, 2025
 - Un cartel de cine: la Mostra de València rinde homenaje a su memoria gráfica - 10 octubre, 2025
 - ‘El cuarto de atrás’: una invitación al desorden - 4 octubre, 2025
 
		
