Maestro Serrano. Palau de la Música de València

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‘Concierto para la ciudadanía. Día de la Comunitat Valenciana’
Orquesta de Valencia, Maestro Serrano
Sala Iturbi
Palau de la Música de València
Pg. De l´Albereda 30, València
5 y 6 de octubre de 2023

La vuelta de la Orquesta de València al escenario del Palau conmemoró el aniversario del nacimiento del Maestro Serrano (1873-1941) bajo el título ‘Concierto para la ciudadanía. Día de la Comunitat Valenciana’. Una adecuada interpretación que cumplió con las exigencias de la velada, con Álvaro Albiach a la batuta, y acompañada por la Soprano Maite Alberola y la mezzosoprano Sandra Ferrández.

La tarea del musicólogo Ramón Ahulló resulta imprescindible en la recuperación de las obras del compositor valenciano, junto con la realización de arreglos de obras como ‘La Valenciana’. Ahulló, que es el mayor experto en el Maestro Serrano de nuestro país, nos habla de las obras que estuvieron presentes en el homenaje y de la importancia de recuperar nuestro patrimonio musical.

“En el archivo del maestro había muy pocas partituras de la obra, solo los papeles de trompeta, trombón, violín, contrabajo, saxo alto y saxo tenor. También había una versión de la ‘Xàquera Vella’, danza típica de aquí; todo apunta a que Serrano quería introducirla y acabó haciendo una variación de esta en ‘La Valenciana’”.

‘Maestro Serrano’. Retrato de José Serrano Simeón realizado por el pintor Alejandro Cabeza.

Además, Ahulló realizó las notas al programa para el concierto, una tarea de redacción e investigación histórica que aportaba información imprescindible para la comprensión de las piezas musicales. En la velada se interpretaron obras del propio compositor en paralelo a otras, de distinta autoría, que se encontraban en relación con la obra de Serrano o que continuaban con la línea folclórica, tan del gusto del maestro valenciano.

“En unas declaraciones para un diario, en 1914, le preguntaron al maestro qué era, para él, la música española, a lo que respondió: ‘La música más bonita del mundo’. No hay país que tenga una variedad de músicas folclóricas y populares tan grande como tenemos en España. Él mismo dijo que no imitaba la música popular, sino que se inspiraba en ella”, cuenta el musicólogo Ramón Ahulló.

Asimismo, se interpretaron piezas como ‘Fantasía sobre motivos de Serrano’, del compositor Ricardo Lamote de Grignon, hijo de una de las principales figuras en la fundación de la orquesta de València en 1943, Joan Lamote de Grignon, director de la antigua Orquesta Municipal.

Su hijo Ricardo, compositor de la obra que nos ocupa, ejerció como subdirector e incluso se alternó en la dirección con su padre en algunas ocasiones. Para la composición de esta obra, se inspiró en motivos preexistentes de las icónicas zarzuelas del Maestro Serrano, tomando prestados motivos de ‘La infanta de los bucles de oro’, ‘La noche de reyes’, ‘Los leones de Castilla’ y la canción ‘Alma de Dios’.

Cabe destacar, igualmente, la interpretación de diversos fragmentos extraídos de las zarzuelas compuestas por Serrano, entonadas de manera alterna por Maite Alberola y Sandra Ferrández. En primer lugar, ‘Los claveles’, de 1929, con el cantable del segundo cuadro de la 4ª escena ‘¿Qué te importa que no venga?’; después, ‘Alma de Dios’, de 1904, junto con el motivo ‘N.º 4. Escena y baile: La Farruca’; y en tercer lugar, ‘El carro del sol’, de 1911, con ‘Canción Veneciana’.

Por otro lado, ‘Los diamantes de la corona’, de Francisco Asenjo Barbieri, una zarzuela donde el propio compositor intentó mostrar la esencia de lo español mediante el bolero a dos voces ‘Niñas que a vender flores vais a Granada’. También pudimos deleitarnos con ‘La Valenciana’, recuperada y arreglada por Ramón Ahulló, la primera obra del Maestro Serrano estrenada en la capital, dedicada a Ruperto Chapí y escrita para la asociación La Senyera.

“Serrano se va a Madrid en septiembre de 1895 bajo una promesa de obtener una beca, la cual resulta fallida, por tanto, acude a la colonia valenciana que había en la capital formada por artistas, músicos, pintores, literarios… Allí, deciden crear una asociación recreativa para agrupar todo este círculo intelectual. En un primer momento la nombran Círculo Valenciano, pero resulta que ya había una sociedad registrada con este nombre, así que la renombran como La Senyera”, detalla Ahulló.

En consecuencia, la obra fue escrita para la jornada inaugural de esta asociación, posible gracias a la colaboración de la cantante vallisoletana Felisa Lázaro, gran amiga de Serrano. En este sentido, el maestro valenciano decide componer una obra, a la que nombra muy consecuentemente ‘La Valenciana’.

Pertenecían a esta asociación grandes artistas de nuestro territorio, como Mariano Benlliure, Joaquín Sorolla o el propio Chapí. “También había diferentes literatos y escritores, y, entre ellos, uno llamado Carlos Llinàs, que escribía en periódicos y hacía de libretista en alguna obra teatral. Este escribió la letra en castellano y valenciano, un valenciano que no estaba normalizado aún”.

Por otro lado, Ramón Ahulló, como experto musicólogo del Maestro Serrano, también nos ilustra la cuestión más musical: “El Mestre Serrano pensó en temas folclóricos para representar ese valencianismo o valenciana, por tanto, hizo una primera parte rápida y una segunda, donde introduce la jota valenciana ‘ja ve Sento de ca la novia’, muy conocida, y después un cant d´albaes –realmente dos entradas d´albaes–, precedidas por una introducción de lo que sería la parte instrumental.”

En la actuación, tampoco faltaron obras de fuera del territorio español, como la suite orquestal de Georges Bizet ‘Carmen’ y sus cuatro partes: ‘Les toreadors’, ‘Près des remparts de Séville’, ‘Je dis que rien ne m´epouvante’ y la famosa ‘L’amour est un oisseau rebelle’. También, ‘Danzas de Galanta’, de Zoltán Kodály, que volvía a mostrarnos motivos folclóricos, esta vez del seno popular de la ciudad húngara de Galanta.

El homenaje al Mestre Serrano no podía terminar sin la interpretación del ‘Himno de la Comunitat Valenciana’, la obra magna del compositor, que le otorgó gran parte de su reconocimiento musical. Un colofón final repleto de simbolismo para el pueblo valenciano que actuaba como guinda del pastel de una tarde musical del más alto nivel.

La cara inversa de la moneda son todas aquellas obras del Maestro Serrano que, eclipsadas por el himno regional, cayeron en el más absoluto olvido. Gracias a figuras como la de Ramón Ahulló, cada vez son más las piezas del compositor valenciano que ven la luz.

“En los últimos seis años, he recuperado tres obras desconocidas e inéditas. Una misa de gloria escrita en latín, para orquesta, tres voces y coro; un poema sinfónico, que emula claramente a su maestro Salvador Giner, basado en el ‘Miserere de la montaña’, de Gustavo Adolfo Bécquer, y que se estrenó de forma inconclusa, además de intentar estrenarlo sin éxito en Madrid; por último, la obra ‘La Valenciana’. También tiene alguna que otra pieza desconocida que aún no ha salido a la luz”.