#MAKMAEscena
‘La poesía en escena y fuera de ella. Lugares y futuros’
Con David Trashumante (Vociferio), Marina de La Fuente (Carme Teatre), Teresa Juan (Melibeas), Jesús Ge (Rimbomba) y Juanma Artigot (TEM)
XIII Vociferio, Festival de Poesía de València | ‘Fes Revés’
Febrero de 2024

Ha pasado un mes desde la XIII edición del Festival de Poesía de València Vociferio y aún estamos asimilando lo que allí se agitó. Las cosas importantes hay que procesarlas. En Vociferio, política y poética son una y la misma cosa. Los distintos espacios ocupados por el festival se convirtieron en trincheras de resistencia y de inspiración. Volvimos a creer en el futuro, aunque el poeta Enrique Falcón le haya puesto fecha de caducidad.

La fiesta de apertura de esta edición se iniciaba con una mesa redonda sobre ‘La poesía en escena y fuera de ella. Lugares y futuros’. El coloquio, celebrado en el Teatre El Musical, estuvo mediado por Jesús Ge, coordinador del ciclo de poesía viva Rimbomba, con la participación de David Trashumante (Vociferio), Teresa Juan y Cristina Bonora (Melibeas) y Juanma Artigot (Teatre El Musical).

El objetivo de esta mesa era debatir acerca del estado actual de la poesía en escena y definir las tareas pendientes. El debate estalla por su propia nomenclatura, que navega entre la poesía escénica, la poesía oral, la poesía viva, la poesía expandida o simplemente poesía. En el caso de Vociferio, en sus inicios, hace trece años, tomaba el nombre de Festival de Poesía Oral y Escénica de Valencia, pero, finalmente, pasaron a definirse como el Festival de Poesía de Valencia.

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“Hemos tenido muchos debates sobre estos etiquetados. Nos preguntamos por estos términos líquidos que se han acuñado entorno a la poesía, buscando salirnos de los formatos ortodoxos y dar una experiencia diferente a la lectura tradicional”, afirmaba Trashumante, director del festival. “Hacia finales de 2010, se va acuñando el concepto de poética expandida. Una poética expandida coge el texto de papel y lo lleva a otros soportes como puede ser el cuerpo, el vídeo, la escena”.

Rimbomba, por su parte, se define como un ciclo de ‘poesía viva’ y en la programación del TEM formula el género de ‘poesía escénica’. Por parte de Melibeas, ellas describen sus actividades como “lecturas en voz alta”. Aunque el nombre se quede en el aire, todas estas prácticas comparten una misma motivación: la traslación del poema a otro soporte que no sea el papel o, por lo menos, el papel entendido dentro del dispositivo libro.

Haciendo un recorrido por la pronta trayectoria de esta práctica, todos los presentes coincidieron en señalar la relevancia de la Sala Carme Teatre en el ecosistema local. Jesús Gé señalaba: “La Sala Carme Teatre siempre ha apostado por la poesía escénica y ha sido un referente en la ciudad para propuestas poéticas”. Situada en el barrio de Marxalenes, la Carme Teatre, bajo la dirección del gestor cultural Raúl Lago, es otra de las sedes del festival Vociferio.

A la Carme se le suma el TEM como espacio escénico con una programación estable de poesía. Y parece que cada vez son más los teatros que acogen estas prácticas. “La semana pasada [febrero de 2024], el Teatro Círculo inauguraba un ciclo de poesía escénica. Y en el Teatro de la Abadía han establecido un ciclo de poetas en la Abadía. Rascando, en Zaragoza tienen Noche de Juglares desde hace más de 30 años. Se está abriendo un camino para el hecho escénico de la poesía”, afirmaba Jesús Ge.

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Juanma Artigot, coordinador artístico del TEM, declaraba, por su parte, que “en el TEM tenemos la obligación de apostar desde lo público por un espacio escénico diverso. En un lugar donde la palabra tiene tanto peso como es un teatro, consideramos que la poesía tenía que contar con un espacio y con los recursos escénicos”.

Pero no toda la poesía toma vida en los grandes espacios teatrales. El colectivo Melibeas organiza ciclos íntimos en la librería La Primera, donde las participantes leen en voz alta poemas ajenos: “Prestamos nuestra voz y cuerpos a poéticas ajenas. Creemos en ese espacio super lateral. Esto es una trinchera de construcción en el cotidiano de la poesía”.

Voluntad por sacar la poesía de los libros, hay. Pero la poesía escénica se enfrenta a una serie de retos para conseguir asentarse dentro del circuito artístico profesional. El primero, señalaba Jesús Ge, es la continuidad: “Los festivales son maravillosos porque son un escaparate, pero lo interesante desde la comunidad poética es que haya una programación estable. El objetivo del ciclo de poesía viva Rimbomba esmostrar, tanto a espectadores como a técnicos culturales, que la poesía puede estar en los teatros, no solo en librerías, no solo en bares”.

Ge, además, remarcaba la importancia de presentar obras completas y no solo extractos breves. Ponía como referencia al dúo Versonautas, que en 2023 presentaban en el TEM la obra completa ‘Preludio a la lentitud’, que también se convertiría en álbum sonoro. “Han rodado por toda España; han recibido premios; se han acercado a la escena desde la escena: han estudiado qué querían contar, han tenido una dirección escénica, una propuesta de atrezo, una propuesta espacial. Cuando hablo con los poetas les digo que tenemos que ir ahí”, señalaba Jesús Ge.

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‘Preludio a la lentitud’ ganó el premio a mejor composición musical de los Premios de las Artes Escénicas Valencianas de 2023, fue nominada a mejor disco de música experimental y contemporánea de los Premios Carles Santos de la Música Valenciana 2023 y, recientemente, han recibido la candidatura a los XXVII Premios Max de las Artes Escénicas en la categoría de mejor espectáculo musical/lírico.

David Trashumante apuntaba, por su parte, hacia la necesidad de una “realfabetización en otras disciplinas”. El éxito de Versonautas se debe también a una apertura de códigos, donde la poesía, la música y las escénicas se disuelven en una propuesta global. “Nos gusta hablar de proyectos poéticos”, continuaba Trashumante. “En el momento en que no sabes hacer algo, puedes contar con terceras personas y romper con el espacio egoico de la poesía del genio creador”. Para Melibeas, aquí también se encuentra la clave: “El futuro es colaboración. Sin colaboración y reconocimiento es imposible llegar a ningún lugar. Hay que trascender el ego”.

Siguiendo con la lista de retos, el festival de Vociferio pone el foco en los nuevos públicos: “Hay que permear y llegar a personas que no lo saben, pero que les encanta la poesía. Hay mucho relato que nos estereotipa. La poesía es una forma de lucha y de resiliencia frente a la idiotez”.

Para Juanma Artigot, estos avances pasan necesariamente por una “mayor inversión económica y que la poesía salga a la calle”. Jesús Ge insistía en que “la reivindicación es en dos direcciones, hacia dentro y hacia fuera. Si quiero que me traten como un profesional, tengo que comportarme como un profesional”. El coordinador de Rimbomba utilizaba como ejemplo de profesionalización la disciplina del circo: “En els Premis de les Arts Escèniques ya cuentan con cuatro premios y antes no existían como disciplina. El trabajo que han hecho de asociarse, generar circuito, festivales, de repente están ahí. ¿Cuándo veremos un premio al mejor espectáculo de poesía escénica?”.