T’estimo, però no tant, de José Luis Alonso de Santos, dirigido por Miquel Murga
Ciclo Compañías Nacionales
Sala Russafa
C / Denia, 55. Valencia
Del 13 al 15 de noviembre de 2015

Sala Russafa arranca su ‘Ciclo Compañías Nacionales’, que durante un mes ofrecerá cuatro estrenos en la Comunidad Valenciana de formaciones venidas de diferentes puntos de España. La primera es la catalana Teatro Gaudí, que esta semana estrena en la Comunitat T’estimo, però no tant. Más adelante vendrán los espectáculos Cualquiera que nos viera (20-22 nov) de la compañía Zanguango, del País Vasco; La Maratón de Nueva York (27-29 nov), de los madrileños Criadero de Morsas; y los sevillanos Producciones Imperdibles presentarán una versión de Los monólogos de la vagina.

Todas ellas tienen en común el género, la comedia. Pero proponen diversos acercamientos, unos desde el enredo, otros echando mano de los gags visuales, otros renovando la puesta en escena tipo monólogo… “Es una selección de compañías de mediano formato pero gran calidad artística que, hasta ahora, no han tenido acceso a mostrar su trabajo en la Comunitat. En cierto sentido, las salas privadas valencianas estamos asumiendo algunas funciones del teatro público, como la exhibición de piezas más allá de los musicales populares o montajes con rostros famosos que encontramos en algunos teatros públicos”, admite Juan Carlos Garés, gerente de Sala Russafa, quien espera que esta dinámica poco a poco se vaya equilibrando.

Escena de T'estimo però no tant. Cortesía de Sala Russafa.
Escena de T’estimo però no tant. Cortesía de Sala Russafa.

El ciclo arranca con una versión catalana, actualizada y revisada de Pares y Nines, de José Luis Alonso de Santos, dramaturgo y Presidente de la Academia de las Artes Escénicas. T’estimo, però no tant retoma esta divertida pieza estrenada hace casi tres décadas, con gran éxito nacional de público y crítica. La nueva versión traslada sus protagonistas a L’Eixample de Barcelona, a un piso que dos amigos cuarentones comparten eventualmente, pese a su difícil relación, ya que ambos estuvieron casados con la misma mujer. Una historia que se complica cuando entra en sus vidas Nines, una joven vecina.

El comunicador, actor y director de escena Miquel Murga dirige esta comedia llena de enredo que habla sobre la amistad y las relaciones personales en estado puro, cuando las situaciones de crisis hacen aflorar lo más genuino de cada personalidad.

Tres personajes radicalmente opuestos son los protagonistas a los que interpretan tres actores catalanes. Josep Linuesa, con una sólida carrera cinematográfica y televisiva con títulos como El Cónsul de Sodoma, además de una larga trayectoria teatral con montajes como ¡Qué desastre de función!, es Robert, un profesor de instituto. El veterano de la escena catalana Ferran Castells, es Fede, un informático en un estado muy poco racional, y la seductora Nines está interpretada por la joven Mónica Corral, quien debuta con esta historia de amor y amistad, con toques de humor y cierto erotismo.

Imagen de ¿Caperucita roja?. Cortesía de Sala Russafa.
Imagen de ¿Caperucita roja?. Cortesía de Sala Russafa.

¿Caperucita roja?

Sala Russafa acoge además el estreno en la Comunitat Valenciana  de ¿Caperucita Roja? (14 y 15 nov), la nueva propuesta de la veterana compañía zaragozana Teatro Arbolé. Con 36 años de profesión y galardones como el Premio Nacional de Artes Escénicas para la Infancia (2009), abordan el popular cuento creado por Charles Perrault  desde una nueva perspectiva, de ahí que incluyan su título entre interrogantes.

En esta nueva versión con títeres, el Lobo ya no es el peligro al que ha de enfrentarse la niñita perdida en el bosque, de camino a casa de su abuela. Manteniendo su moraleja sobre la importancia de obedecer a los mayores y la enseñanza sobre los peligros de la vida, ¿Caperucita Roja? se deshace de los mensajes negativos sobre los animales y presenta un final menos trágico, haciendo gala de un derroche de ingenio a la hora de dar una nueva vida en las tablas a esta famosa historia.

Escena de T'estimo, però no tant. Cortesía de Sala Russafa.
Escena de T’estimo, però no tant. Cortesía de Sala Russafa.