Joaquín Salvador Lavado Tejón, ‘Quino’
Creador de ‘Mafalda’ (1964-1973)
Fallecido el 30 de septiembre de 2020

“La mejor edad de la vida es estar vivo”, así de claro lo dice Mafalda. Deberíamos repetirnos esta frase nada más levantarnos de la cama; mejor aún, nada más apagar la alarma de nuestro despertador. El gran Quino nos dejó el último día de septiembre, una razón más para mirar con odio a este 2020 que tan fuerte nos está dando, pero también para recordar que estamos en la mejor edad posible.

Quino
Ilustración de Mafalda, de Quino.

Cuesta imaginar que Mafalda, esa niña, pensadora y algo pesimista (¿es posible que el pesimismo sea una consecuencia directa del acto de pensar?) naciera con fines publicitarios en los años sesenta. El anuncio nunca llegó a ver la luz. Por fortuna, Mafalda sí lo hizo.

El autor argentino hablaba a través de una niña pequeña temas tan poco de moda en aquel entonces como la igualdad, el feminismo, la pobreza, la diferencia de clases sociales… realidades incómodas que siempre nos han hecho girar la cabeza hacia otro lado. Quino no solo no lo hizo, sino que se enfrentó a ellas a través de sus dibujos. Mafalda es un reflejo de la sociedad en general y de cada individuo que la compone en particular. Ahí es nada.

Viñeta de ‘Mafalda’, de Quino.

Todos conocemos a Mafalda, Felipe, Manolito, Miguelito, Guille, Libertad y Susanita. Los conocemos porque nos sentimos identificados con ellos, porque en algún momento de nuestras vidas hemos sido alguno de ellos. En ocasiones, todos a la vez.  Todos hemos sido esa niña que quiere la paz, que no solo no entiende la injusticia sino que tampoco la acepta. Hemos sido la superficial Susanita y su amor no correspondido, Felipe y su costumbre de posponerlo todo, Manolito y su amor por el dinero…

Ilustración de ‘Mafalda’, de Quino.

La última publicación de Mafalda fue en 1973, sin embargo, siempre ha estado de actualidad. Las viñetas de Quino no pasan de moda, esto es debido en parte a que la estupidez humana tampoco lo hace. Dejó de dibujarla no porque no tuviera éxito, sino porque tenía la sensación de que comenzaba a repetirse y le parecía deshonesto. Una decisión sencilla y difícil de tomar. Otra razón para admirarle.

Quino alzó la voz sin gritar. Habló con sentido y con humor. Llegó a lo más profundo de nosotros por el camino más difícil. Quino fue el hombre que dibujó la verdad para remover conciencias. Él hizo su trabajo, el nuestro debería ser cuestionarnos lo que nos rodea, no dar por hecho que lo normal es lo aceptable. Sería una bonita forma de rendirle homenaje ¿verdad?

Viñeta de ‘Mafalda’, de Quino.

Danae N