Nelo Vinuesa. Lógica ampliada

Nuestro mundo se parece, cada vez más, a un enorme y disparatado parque temático. Es el resultado de una estrategia desarrollada eficazmente con el fin de descargar de significado la vida cotidiana. Si miramos bien, es prácticamente imposible asignar responsabilidades por la mala gestión que sufren los estados, porque la red que tejen los intereses planetarios de la política y la economía son una maraña que se retroalimenta, dando la espalda a la “cosa pública”, despreciando el interés general, el equilibrio ambiental y hasta el sentido común. Nuestra sociedad vive inmersa en un simulacro que no es más que una máscara que quiere ocultar su ahondamiento moral.

Ya no es posible hablar de arte sin referirnos a la sociedad, seguramente nunca fue posible hacerlo, pues cuando el arte se queda al margen de la realidad de su tiempo no puede calificarse más allá del divertimento y la impostura estética. En algunas ocasiones los artistas disponen de la capacidad para elaborar una reflexión social mediante un discurso artístico que, a través de lo lúdico, nos guía para desentrañar los significados de lo contemporáneo, como sucede en los trabajos de Nelo Vinuesa (Catarroja, 1980). La condición de la participación del espectador se encuentra presente en algunos de sus trabajos, recordándonos que las cosas no funcionan solas, pues para que el mundo ande nosotros debemos andar. Generalmente, los cambios que esperamos tienen en realidad su origen en la activación de cambios individuales.

Nelo Vinuesa. Serie "Las invasiones", 2013. Imagen cortesía del artista
Nelo Vinuesa. Serie «Las invasiones», 2013. Imagen cortesía del artista

Nelo Vinuesa, en su hibridación de lenguajes, recurre a fuentes diversas con la misma naturalidad que podemos cocinar una paella a leña, mientras con la otra mano utilizamos la última tecnología en un dispositivo de comunicación móvil. Esa interpretación horizontal, no jerárquica, del tiempo y de los recursos le permite hacer cohabitar referencias de la ciencia médica con estímulos estéticos de la cultura popular. Su colaboración para la revista Mètode se ha plasmado mediante el desarrollo de una serie de pinturas y dibujos sobre papel que ha relacionado con el cancer, titulada “Las invasiones”, que conecta coherentemente con trabajos anteriores como “Scroll”  (2006).

Sus obras son el resultado de todo un proceso de superposiciones y estratos que conviven, que se solapan o que se anulan entre campos de acrílico, dibujo, recorte o vinilo. Toda una metáfora del entramado convulso de relaciones propia de individuos que se encuentran en el epicentro del caos global. En este caso, cada una de las capas que integra la obra de Vinuesa son como extremidades de un cuerpo, capaces de configurar la complejidad de un relato médico mientras no se les ampute del contexto, como totalidad que forma parte de una unidad de significación concreta. El sistema completo se comporta de un modo distinto que la suma de sus partes, por lo que se enfatiza la importancia del todo como algo que supera la mera enumeración de las partes que lo integran, a la vez que se pone de manifiesto la interdependencia de estas.

Nelo Vinuesa. Serie "Las invasiones", 2013. Imagen cortesía del artista
Nelo Vinuesa. Serie «Las invasiones», 2013. Imagen cortesía del artista

La historia de la humanidad se caracteriza por la imposibilidad de construir una verdad unívoca, absoluta. La tentación de ficcionar, y amoldarnos con ello a la imagen del deseo y no a la realidad, es una fórmula de subsistencia humana que permite optar por aplicar una dosis de “engaño” mediante la reelaboración de la memoria.

En su trabajo están presentes referencias que proceden de la alta y de la baja cultura, categorizadas en igualdad, predominando un código visual heredado de los primeros videojuegos. Vinuesa nos propone un ejercicio que relativiza la imagen traumática de la enfermedad a través de una inyección de color propia de su método artístico. Su juego nos recuerda que lo imposible no existe, que disponemos de la capacidad para derribar los límites mentales que hacen de nuestra realidad un lugar acotado y angosto, empujándonos a renunciar a la pasividad como forma de estar vivos. La obra de Nelo Vinuesa devuelve felizmente a los mayores a su niñez, a la vez que da a los niños la posibilidad de disfrutar de su momento desde una lógica ampliada.

José Luis Pérez Pont

Nelo Vinuesa. Serie "Las invasiones", 2013. Imagen cortesía del artista
Nelo Vinuesa. Serie «Las invasiones», 2013. Imagen cortesía del artista