Yo os salvaré a todos, de Émilie Frêche
Editorial Nube de tinta
Editorial Bromera

¿Qué pasa por la cabeza de unos padres al descubrir que su hija de 17 años desaparecida hace meses se encuentra en Siria integrada en el Estado Islámico? ¿Qué motivos llevan a una joven europea a renunciar a su cultura y libertades para convertirse en terrorista? En clave de ficción asentada en una cruda y acuciante realidad la escritora francesa Émilie Frêche plantea las respuestas a estas complejas cuestiones en su novela Yo os salvaré a todos, publicada recientemente en España por Nube de tinta en castellano y por Bromera en valenciano. Aunque está etiquetada  como novela juvenil, por la materia que trata es indicado también para adultos.

El libro está dedicado a Gilbert Frèche, abuelo de la autora que murió, en 1957, en Argel, asesinado por el FLN que lo confundió con otra persona. “No llegué a conocerlo”, dice Frèche. “Los periódicos de la época hablaron de un atentado terrorista y su muerte violenta, de la que sólo me enteré años después a base de hacer muchas preguntas planeó siempre en el imaginario de mi infancia”.

Portada de Jo us salvarè a tots, de Émilie Frêche.
Portada de Jo us salvarè a tots, de Émilie Frêche.

Frèche ahonda en las raíces de un fenómeno sin parangón en la historia a través de dos relatos íntimos en primera persona, el diario de Laurence, padre de Eléa, la muchacha desaparecida y el de ella misma escrito un año antes que va descubriendo poco a poco cómo llega a cruzar la frontera entre la influencia y la convicción, y cómo sus sueños de futuro, su primer amor,  sus amistades, son reemplazados por la manipulación, la sumisión, el extremismo. Laurence expresa su tristeza contando a su hija ausente sus intentos de superar la situación participando  en grupos de desradicalización que luchan para crear conciencia, tratando de impedir la salida de otros adolescentes y de alguna manera contrarrestar así la falta de su hija. “No me resultó difícil desdoblarme en ambos personajes”, asegura Frèche. “Me sumergí en cada uno de ellos y la historia avanza a través de sus voces y el lugar donde están, que son lugares diferentes ya que no escriben en el mismo momento de la historia”.

La novelista escogió este delicado tema para intentar comprender el mecanismo de iniciación al islamismo radical. “Cuando la prensa habló de las primeras fugas de jóvenes franceses a Al-Raqqa me quedé atónita”, cuenta.  “No comprendía como un chico o chica nacido en Francia, educado en la escuela de la República podía cambiar de mentalidad hasta el punto de ponerse en contra de su propio país”.

Para documentarse a fondo sobre el tema Frèche leyó numerosos testimonios, artículos, etcétera. “Cuando escribí la película Le ciel attendra, que también trata el tema del radicalismo, pude entrevistar a fondo a una treintena de jóvenes en la misma situación que mi personaje, así como a sus familias. Los padres de estos chicos son las mayores víctimas, abandonados por sus hijos y por el Estado en la época que yo estudié el tema, en 2015”.

¿Qué motivos llevan a una chica educada en un ambiente de libertad y tolerancia a asumir unas creencias que limitan sus derechos humanos? “La religión llega en una última etapa como única manera de salvarse y de salvar a las personas que quieren del Apocalipsis, de ahí el título de la novela”, responde Frèche. “El punto de partida es el deseo de cambiar las cosas, la sensación de estar fuera de lugar en el mundo que conocen. Es un rechazo a  la  realidad que les rodea y la adhesión a las teorías de la conspiración”.

Yo os salvaré a todos, de Émilie Frèche.
Yo os salvaré a todos, de Émilie Frèche.

¿Hasta qué punto es culpable la sociedad de estas conversiones? “No hay que atribuir toda la responsabilidad a la sociedad, pues es la misma para todas las personas que la integran y son pocas las que se radicalizan. Pero es verdad que la sociedad de consumo ofrece un horizonte poco satisfactorio a los jóvenes, pues en muchas ocasiones se convierte en una máquina de frustración para ellos. La juventud de hoy, como la de todas las épocas tiene sed de ideales y más que una religión buscan una forma de espiritualidad que esperan que  colme sus necesidades”.

El pasado mes de febrero el primer ministro francés, Édouard Philippe presentó un nuevo plan gubernamental, el tercero en cuatro años, para frenar la radicalización yihadista, tras el fracaso de los programas anteriores. Fija los esfuerzos en dos pilares: las prisiones y las escuelas, focos principales del contagio yihadista y en los que se centran la mayor parte de las 60 medidas que el Gobierno de Macron ha preparado durante meses. El plan incluye mayor control financiero, así como de los yihadistas en prisión, donde se han creado 1.500 celdas de aislamiento. También cambios en la educación para fomentar el espíritu crítico de los jóvenes y evitar que caigan en las redes de las teorías de conspiración.

Novelista y cineasta, Émilie Frèche  es autora de novelas: Les Vies denses (Ramsay, 2001), Una mujer normal (Ramsay, 2002), La sonrisa del ángel (Anne Carrière, 2006) y Chouquette (Actes Sud, 2010). Publicó varios artículos sobre la muerte de Ilan Halimi, un joven judío secuestrado y asesinado por una banda de musulmanes, y ha escrito el guion de la película Ils sont partout (2016) de Yvan Attal, una comedia con bocetos sobre el antisemitismo. En 2015, escribió con Marie-Castille Mención-Schaar, Les Héritiers, un drama sobre jóvenes candidatas a la yihad.

Émilie Frèche. Fotografía de Melania Avanzato por cortesía de la autora.
Émilie Frèche. Fotografía de Melania Avanzato por cortesía de la autora.

Bel Carrasco