Biennal de Mislata Miquel Navarro
Premios Adquisición Mislata 2019
Diciembre de 2019

El pasado viernes 13 de diciembre de 2019 se celebró la presentación de la Biennal de Mislata Miquel Navarro de pintura y escultura en el Centro Cultural Carmen Alborch, y se realizó la entrega de los premios de adquisición a dos de los artistas participantes: el primer premio concedido a Miquel García Membrado y el segundo a Irene Grau, cuyas obras pasarán, ahora, a formar parte de la colección pública del Ayuntamiento de Mislata.

La Biennal tiene como objetivo principal promocionar el trabajo de artistas visuales en activo de cualquier nacionalidad, dando cabida a todo tipo de propuestas. Este año, como en ediciones anteriores, la exposición se centra en el compromiso social en las artes visuales. Sin embargo, incorpora una novedad establecida en las bases del concurso: la reflexión entorno al concepto de memoria y olvido.

Un jurado profesional –formado por Alba Braza (comisaria de la exposición), Isabel Tejero y Ester Alba Pagán– se encargó de la selección de las diez obras (de las 308 presentadas este año) que figurarían en la exposición de esta Bienal. A la hora de escoger las obras, el jurado tuvo en cuenta el curriculum vitae del participante, la calidad artística de la pintura o escultura, la claridad de su explicación, adjuntada en el dosier del proyecto presentado, y la adecuación de la propuesta a la convocatoria.

Sin embargo, se incorporó una novedad metodológica frente a ediciones anteriores, y fue la creación de una delegación ciudadana, formada por habitantes de Mislata, que se encargaba de una parte del proceso de selección. Los ciudadanos que conformaban esta delegación eran de edades diversas y no estaban vinculados al mundo del arte. Así, de las diez obras escogidas, el jurado seleccionó cuatro finalistas y la delegación ciudadana se encargó de escoger las dos obras que recibirían el primer y segundo premio. Para ello, no se siguieron criterios estéticos, sino que se trabajo conforme a qué obras manifestaban una mayor coherencia en su planteamiento y cuales respondían mejor al concepto de memoria y olvido.

‘List of burned Books in Germany in 1933’ (2018), obra del ganador Miguel García Membrane.

La exposición se divide esencialmente en tres bloques temáticos, y entorno a ellos gira la obra de los diez participantes. En primer lugar, la memoria entorno a conflictos bélicos como el Holocausto o la guerra civil española; ejemplo de ello es la obra del ganador Miquel García Membrado, ‘List of burning Books in Germany 1933’, que parte de la lista de libros prohibidos por el régimen nazi en Alemania y quemados en Opernplatz (actualmente, Bebelplatz) la noche del 10 de mayo de 1933. También podríamos integrar en este bloque la obra del grupo Art al Quadrat ‘Les jotes de les silenciades. Mathilde canta a Avelina’, que trata de mostrar la represión que sufrieron las mujeres de líderes republicanos a manos del franquismo, o la obra de Valle Galera ‘Servilletas’, compuesta por ilustraciones que recogen los rótulos de los distintos bares o locales en los que se mantenían relaciones homosexuales durante la época franquista.

Por otro lado, se trató la memoria ecológica, aquellos parajes naturales ya perdidos o aquellos que se están perdiendo. Así, la obra de Irene Grau ‘Sobre lo que resta’ asume como pigmento las cenizas de los árboles que perecieron en los incendios de Galicia y Portugal en octubre de 2017, mientras que la pintura de Josep Tornero ‘Black Tide’ trata los desastres del hundimiento del petrolero Prestige frente a las costas gallegas el 19 de noviembre de 2002. Un caso más cercano a la Comunidad Valenciana es el que retrata Rafael Tormo i Cuenca en ‘Senyal de plenitud, el día després’, que parte de un proyecto de investigación sobre el impacto producido por la Pantanada de Tous en 1982 en las localidades más afectadas, Beneixida y La Llosa de Ranes.

‘Sobre lo que resta’ (2019), obra de la ganadora Irene Grau.

El último bloque temático que encontraremos en la exposición versa entorno a la memoria de género, y trata de visibilizar la labor femenina en distintos ámbitos. Así, encontramos la obra de Davinia V.Reina Dux ‘feminia facti’, que parte de la antigua revista Victoria Press, dirigida por un grupo de protofeministas victorianas, o ‘Pared, vicio y dependencia’, de María José Ribas Bermúdez, donde la artista rememora la fábrica de tabaco de Alicante que, con mano de obra esencialmente femenina, se convirtió en un paradigma de la lucha feminista. Por último, el grupo O.R.G.I.A presentaba una serie de fotografías, ‘Serie Verde’, que investigan sobre la masculinidad y la feminidad del tardofranquismo basándose en documentos gráficos y sonoros de la época.

De este modo, la Bienal de Mislata se propone este año recordarnos aquello que no debemos olvidar, y nos incita a utilizar el arte como un canal a través del cual investigar nuestra propia memoria, individual y colectiva, como medio para construir un futuro diferente.

Sofía Torró Álvarez