IX Edición de Fresh Aet
Facultad de Bellas Artes San Carlos
Universitat Politècnica de València
Avenida dels Tarongers, s/n. València

Producto disponible, de Javier Martínez García, es el proyecto más valorado por el jurado de la IX edición del concurso/beca DKV Fresh Art. De todas las convocatorias anteriores, nunca una propuesta de pintura se había colado entre las tres primeras que llevan dotación económica. Otras disciplinas: dibujo, graffiti, escultura, fotografía, instalación o audiovisual, siempre habían obtenido mejores valoraciones en las ediciones precedentes.

En cualquier caso, y visto lo visto en la disciplina que sea, Fresh Art es una convocatoria en donde puede disfrutarse del arte más fresco. Creaciones realizadas por jóvenes estudiantes de secundaria que han pasado una pre-selección a nivel nacional, para que una vez realizada dicha pre-selección se hayan ido quedando los perfiles artísticos con más talento, hasta que un puñado de finalistas son convocados a un Campus en el recinto de la Universitat Politècnica de Valencia (UPV). Allí, internos entre los días 26 y 30 de junio, han realizado talleres con profesores de la Facultad de Bellas Artes San Carlos y, desde allí, han sido acompañados también para realizar sendas visitas al Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) y el Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad (MuVIM).

Durante sus días de estancia en el Campus de la UPV, el objetivo de cada uno de los seleccionados fue realizar el proyecto que expuso tras su conclusión como punto final, compartiendo y conviviendo experiencias con los demás compañeros seleccionados, desde el desayuno hasta la cena.

Para Javier Martínez, el madrileño ganador de la presente edición, “ha sido una experiencia única, y aunque cada uno de nosotros trabaja para ser el mejor, existe mucho respeto hacia el trabajo de los demás compañeros. Respeto y admiración”, redunda Javier.

Javier Martínez ante su obra, "Producto Disponible". Fotografía, Vicente Chambó.
Javier Martínez ante su obra, «Producto Disponible». Fotografía, Vicente Chambó.

Junto a la obra pictórica, basada en un autorretrato, el joven creativo dispuso una tablet en la que puede verse el desarrollo de una página web a través de la cual -y jugando con la ficción- oferta partes de la propia obra pictórica exhibida, creando una atmósfera de reflexión que pone de manifiesto su talento especial, su poder imaginativo y su esencia crítica.

Para el artista y profesor de pintura Chema López, tutor de Javier Martínez durante estos días, “el profesor debe ayudar a que el artista saque su personalidad, evidentemente, cuando llega hasta aquí, el talento está más que demostrado”.

Y es que cada año, la maquinaria de los organizadores se pone a cero para arrancar de nuevo, e iniciar contactos verbales con diferentes institutos de secundaria para que éstos propongan a sus alumnos más destacados en artes visuales. Así, los 3.000 euros con los que el ganador se ve recompensado, van acompañados de otros 1.000 euros destinados a su instituto o centro educativo. En caso del segundo premiado, 2.000 € y 1.000 a su centro educativo, y en caso del tercer premio, de 1.000 euros y 1.000 a su centro educativo.

En esta ocasión, el segundo premio se lo ha llevado el valenciano Darío López Martínez por Me parecería violento titular la obra. Una pieza que nos conduce a la esencia de El Bosco, aunque con gran personalidad. Darío recibió la mencionada beca de estudios valorada en 2.000 euros.

Darío López Martínez ante su dibujo, "Me parecía violento titular la obra". Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.
Darío López Martínez ante su dibujo, «Me parecía violento titular la obra». Fotografía cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.

Por su parte, Antonio Alcaraz, director del departamento de dibujo de la FBBAA San Carlos y tutor de Darío López Martínez durante su estancia en el Campus, comenta que “en muchos casos, nuestra labor pasa por mostrarles un camino coherente, reconocible y cohesionado, a tener personalidad y estilo propio en sus dibujos”.

El tercer premio recayó en Anna Meléndez Morales, de Girona, por Consumits al instant, un proyecto escultórico compuesto por varias piezas ordenadas sobre la pared con un interesante juego de orden, equidistancia y crítica a los problemas de consumo y sostenibilidad. Anna recibió la mencionada beca de 1.000 euros.

Anna Meléndez Morales ante una parte de su pieza escultórica "Consumits al instant". Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.
Anna Meléndez Morales ante una parte de su pieza escultórica «Consumits al instant». Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.

El jurado de la presente IX edición no lo ha tenido fácil y ha propuesto, además, tres menciones especiales, que han recaído en Guillem Pujol Crespo por su escultura 1=0; Juan Pablo Bracho Salas, por el graffiti Introspection, y Alicia Del Pino Dolz por su vídeo The house of Mirth.

Guillem Pujol Crespo, con su escultura titulada "1=0". Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.
Guillem Pujol Crespo, con su escultura titulada «1=0». Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.

Tras analizar, caso por caso, pieza por pieza, el resultado del paseo por la exposición concluye con un denominador común: talento precoz. Cualquiera podría haber alterado los resultados, y todos los jóvenes deben sentirse afortunados ganadores.

Juan Pablo Bracho Salas, ante su graffiti "Introspección". Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.
Juan Pablo Bracho Salas, ante su graffiti «Introspección». Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.
Alicia del Pino Dolz, ante su video "The house of Mirth" en un momento del montaje. Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.
Alicia del Pino Dolz, ante su video «The house of Mirth» en un momento del montaje. Fotografía, cortesía Facultad de Bellas Artes San Carlos.

En palabras de Alicia Ventura, comisaría de la colección DKV de arte contemporáneo, “tras una convivencia tan intensa como la que experimentan, Fresh Art es el vínculo de unión de muchos de estos jóvenes, que van pasando los años y mantienen la amistad a través de redes sociales cuando viven en lugares geográficamente alejados”.

Y es que, conforme a lo citado anteriormente, en la concluida IX edición de Fresh Art, a los citados ganadores, hay que sumar los nombres del resto de becados: Othamane Bachiri Ouichi, Mariona Barbé Nieto, Juan Pablo Bracho Salas, Josep Ferragut Capllonch, Alicia del Pino Dolz, Guillem Pujol Crespo, Nuria Roca Vallejo, Laura Van Hattum Alani, y Ana Vázquez Casuso, que han sido seleccionados entre más de 1.000 participantes que han presentado un total de 1.500 obras.

Miembros del jurado evaluando la obra de Javier Martínez.
Miembros del jurado evaluando la obra de Javier Martínez.

En palabras de Luis Framis, responsable de Arteria DKV, “de entre los doce, tres de ellos son de Cataluña, otros tres de la Comunidad de Madrid y dos de la Comunidad Valenciana”.

“La siguiente edición será la 10ª convocatoria de Fresh Art y esperamos celebrarla con un aumento en la dotación económica y otros premios especiales”, añadió Framis, haciendo referencia clara a la apuesta de continuidad de la convocatoria.

Pepe Galindo, Alicia Ventura, Luis Framis, y Teresa Cháfer en un instante del acto de entrega de premios.
Pepe Galindo, Alicia Ventura, Luis Framis y Teresa Cháfer en un instante del acto de entrega de premios.

En la entrega de premios, conducida por última vez por Teresa Cháfer -que deja la dirección de la Cátedra DKV en Arte y Salud y pasa a ser Vicedecana de Calidad y Comunicación de la citada Facultad de Bellas Artes San Carlos-, hubo muchas palabras de agradecimiento para los organizadores, acto en el que se estrenó Pepe Galindo, como Decano de la propia Facultad de Bellas artes, y que apuesta claramente también por la continuidad de Fresh Art.

Tal vez debería plantearse la exposición de estos jóvenes en un espacio más céntrico para facilitar su visita al gran público. Este tipo de premios debería tener como finalidad incentivar y ayudar a que sus receptores se lo crean. Ojalá los políticos comprendan de la necesidad de una ley de mecenazgo que ayude a consolidar a estos jóvenes para que puedan desarrollarse como profesionales creativos, del pensamiento, y de la cultura.

Allanar el terreno y facilitar que puedan vivir de su vocación para convertirla en su trabajo, es armar una estructura sólida, de futuro y de bienestar.

Vicente Chambó