Deborah Micheletti y Giovanna Ribes, directoras de Dona i Cinema.
#MAKMAEntrevistas | Giovanna Ribes y Deborah Micheletti
VI Bienal Internacional Dona i Cinema – Mujer y Cine – Woman & Film
Cines Babel, Octubre Centre de Cultura Contemporània (OCCC) y Filmin
Hasta el 23 de enero de 2021

La sexta edición de Dona i Cinema encara la segunda parte de su cronograma –que concluye el próximo sábado 23 de enero– solidificando la naturaleza de un festival comandado por mujeres que pone en valor el trabajo de directoras, productoras, creadoras, artistas y cualquier agente que intervenga y/o materialice una pieza audiovisual a nivel nacional e internacional.

Y para seguir hablando en femenino, Dona i Cinema cuenta con Amparo Sánchez como madrina de excepción –recientemente ganadora del Goya a mejor maquillaje y peluquería por ‘El hombre que mató a Don Quijote’, del inclasificable Terry Gilliam–, así como las artistas Victoria Cano –al frente del diseño del estatuet (galardón del festival)– y Eva Bello, quien rubrica la imagen de un cartel que mira al futuro.

Un porvenir que en 2021 debe convivir, por necesidad coyuntural, entre las proyecciones y actividades presenciales –que tienen lugar en los Cines Babel y en el Octubre Centre de Cultura Contemporània (OCCC)– y el streaming de su sección oficial de ficción, documental y cortometrajes en la plataforma Filmin.

Por ello MAKMA entrevista a sus directoras, Giovanna Ribes y Deborah Micheletti, con el fin acercarnos de primera mano a la idiosincrasia de un festival tan sugestivo como necesario.

Dona i Cinema
Cartel del VI Dona i Cinema creado por Eva Bello.

¿Cuál fue el origen de Dona i Cinema?

Giovanna Ribes (GR): Nosotros empezamos con [el colectivo] Dones en Art, que llevaba ya 17 años, y comenzamos con Dona i Cinema al cuarto o quinto año, tras un periodo de crisis en el que propuse centrarnos en el cine. La parte intencional se la dimos por requerimientos del ICAA [Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales].

¿Qué peculiaridades o diferencias conlleva tanto el carácter bienal del festival como que sea protagonizado por mujeres creadoras?

(GR): La diferencia es la siguiente: aparte de ser bienal, no todos los festivales seleccionan las películas de mujeres. Nosotras tenemos ese punto a favor (que podría ser malo, ya que a veces las cineastas no quieren estar en festivales de mujeres porque piensan que están compitiendo).

Deborah Micheletti (DM): Durante todo el año hacemos proyecciones en colaboración con otros festivales y asociaciones (para que no se olviden de nosotras), y creamos debates sobre migración, refugiados y sobre derechos humanos. De hecho, como novedad, en el año previo a la siguiente edición abriremos una sección que se llamará ‘Dona & Right’.

Una de las áreas que singularizan el festival es la sección en la que se exhiben proyectos de videocreación. ¿De qué modo comenzó a formar parte del cronograma de Dona i Cinema?

(GR): En el origen lo propuse yo porque veía que muchos festivales tenían la videocreación muy apartada; por ello, en la primera edición incluimos una retrospestiva de los cinco años anteriores. Más tarde, cuando Deborah Micheletti se incorporó a Dona i Cinema también defendió esta sección.

(DM): Sí, no hay muchos festivales que tengan videocreación (nos lo dicen las autoras).

(GR): Además, no nos damos cuenta y, hoy en día, el documental a veces bebe de la videocreación y dentro de la ficción también se aplica la animación en los documentales. La videocreación aporta todo un bagaje a lo que es el lenguaje cinematográfico puro y duro, que es lo que le hace tener un poquito de empaque para que el documental mejore.

¿Cuál es el criterio por el que os conducís para configurar el programa?

(GR): De partida, los largos documentales y de ficción los seleccionamos nosotras – aunque contamos con una tercera persona para desempatar– y para el resto siempre ha habido una comisión.

(DM): Para los cortometrajes, por ejemplo, lo que queremos es calidad, que no sea amateur, e incidimos en estas indicaciones. Para los argumentos tenemos la rama violeta y la gente que nos rodea también. A ese comité les recomendamos variedad de temáticas, que no solo sean feministas, de género, siempre sobre mujeres, sino que nos sorprendan con historias diferentes, de humor…

(GR): Nos encanta cuánto somos capaces de reirnos de nosotras mismas.

(DM): Son unos comités de gente bastante joven, estudiantes, personal de prácticas en la productora y que quieren entrar en el mundo profesional. También quienes participaron en el programa Atenea, que consiste en tutorizar, de manera personalizada por expertas del sector [Ateneas], los proyectos de cinco estudiantes o recién graduadas de carreras audiovisuales [Amazonas], con el fin de orientar, aconsejar y potenciar la viabilidad de sus proyectos.

(GR): Cada año, las remesas que nos llegan son muy variopintas. Nosotros cada vez somos más globales. Hay sensibilidades que van pululando porque estamos en un momento determinado; de hecho, cortos sobre la covid ha habido millones.Este año, lo que hemos percibido es que no ha habido un denominador común. Hay cuestiones de género que siempre aparecen, temas más cercanos o más candentes, pero esta edición es una de las secciones oficiales más abiertas.

En esta edición habéis implementado de manera novedosa el visionado online a través de la plataforma Filmin. ¿Qué pensáis acerca de las circunstancias que lo ha propiciado?

(GR): Igual sería bueno mantener estas circunstancias todos los años… Deberíamos pensar en cómo funciona, porque a consecuencia de esta situación, abrir otras puertas ha hecho que, tal vez, sea beneficioso.

(DM): También hay que mantener el formato presencial (es imprescindible), por la interacción con las directoras, los coloquios…, pero la proyección online sí abre puertas; y al programarlas durante la semana, te ofrece la posibilidad de poder verlas en cualquier momento.

La investigadora, artista plástica y docente Lourdes Santamaría Blasco, ponente de la charla ‘Representación de personas trans en el audiovisual’. Fotografía cortesía de Dona i Cinema.

Se vislumbra un carácter integrador y de debate en todas y cada una de las actividades que habéis propuesto. ¿Cuáles son los objetivos de esta área de la programación?

(DM): Queremos romper la brecha de que solo se vean historias de hombres blancos y heterosexuales. A parte de nuestras convicciones personales sobre el colectivo trans, está bien aliarse, porque el objetivo es el mismo. Desde el primer momento en que estuve involucrada en Dona i Cinema dije: “Hay que hacer una mesa redonda”. Nos dimos cuenta de que el colectivo no estaba contento con la representación que se hacía en la gran pantalla. En Dona i Cinema usamos un lenguaje neutro; hay que entender unas realidades y lo que nos da miedo, a veces, es no conocer.

(GR): Nosotras nos hemos abierto; de hecho, este año pasado proyectamos un documental sobre una chica que había ejercido la prostitución y también invitamos a los colectivos de trabajadoras del sexo.

Otro ejemplo son las ‘Iniciativas por la igualdad en el audiovisual’, en el que todas las productoras y asociaciones de productoras han conseguido unirse para poder tener representación sobre todo el territorio nacional, porque, si no, todas las mujeres que discuten temas con el Gobierno se convierten en temas centralistas.

Sin desmerecer a la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales [CIMA] (de la que formamos parte), lo que intenta nuestro grupo de trabajo es ver las diferentes realidades de cada territorio; por eso es tan importante esa mesa para que cada una pueda contar su realidad dependiendo de la zona geográfica de la que provenga.

(DM): Y que esas realidades lleguen al Ministerio.

¿Cuál ha sido vuestro aprendizaje hasta ahora al frente de Dona i Cinema?

(GR): En gestión vamos más rápidas y hemos aprendido a no abarcar más cosas de las que podemos.Tenemos un equipo y hemos conseguido involucrar a más personas en este proceso. El año pasado hicimos el trabajo de visitar personalmente a las instituciones que nos apoyan, puesto que nunca venía nadie a la ceremonia de inauguración y clausura. Nosotras pedimos visibilidad.

Además, también es muy importante el trabajo de Deborah en gestión (dosieres para ayudas y otras áreas). No queremos crecer más porque entraríamos en un bucle de competición, pero sí nos hubiera gustado tener un poquito más de presupuesto en ediciones anteriores para no hacer nosotras solas el festival. Ahora estamos afianzando el presupuesto, aunque depende de las ayudas.

¿Qué camino le queda por recorrer a la mujer dentro del sector audiovisual?

(GR): Todo. A nivel de las producciones queda todo por recorrer. Ahora estamos en el punto álgido, pero en el inicio del descenso, la gente empieza a quejarse: “¿Por qué la paridad?…”. Ojalá no existiéramos como festival, que no fuera necesario porque las leyes están ahí. Sí hay más mujeres productoras, pero en los comités, en las distribuidoras, en las salas de cine…, sigue sin haber muchas mujeres.

Además, existe el trampeo, la codirección, para poder tener los puntos (chico, chica). Y, muchas veces (aunque no siempre) esas codirecciones no son reales, ponen a alguien como directora que ni ha pasado por el plató. Y esto te hace pensar que socialmente experimentamos un retroceso.

(DM): Se nota una cota mayor de películas hechas por las nuevas generaciones, pero lo que me preocupa es que no se olviden de que tienen que seguir luchando por esos derechos, porque está comprobado que son los primeros que se pierden. Espero y tengo confianza en que si no bajan la guardia no se retrocederá. Falta mucho hasta llegar a la normalización y que no sea necesario hacer este tipo de festivales (y no se si llegaremos algún día).

Por el bagaje, la programación y el momento de Dona i Cinema, ¿cómo definiríais la presente edición?

(GR): Es la edición del cambio. Es como una nueva etapa.

(DM): Es la edición del cambio estructural, del cambio a mejor, porque nos hemos abierto a más equipo y a no tomar tantas decisiones; nos gusta que todos decidan. La covid nos ha puesto un poco a prueba. Estamos afianzándonos. Creo que hemos contribuido a la visibilidad de la mujer. Estamos ahí y tenemos que ser incómodas.

+ Información: http://donaicinema.es/

Deborah Micheletti y Giovanna Ribes, directoras de Dona i Cinema.
Deborah Micheletti y Giovanna Ribes, directoras de Dona i Cinema.

Merche Medina