Valencia Jazz. Perdido Club y otras voces de una eclosión musical
Centro Cultural Bancaja
Plaza de Tetuán, 23. Valencia
Hasta el 8 de mayo de 2016

Ahí está, en medio de un centenar de piezas, la corneta antigua utilizada en la decoración del club Perdido. Y, como tocando a rebato, provocando la estampida de un sinfín de emociones. Todas ellas relacionadas con el jazz que vivió su época de esplendor en Valencia en la década de los 80 y 90. La Fundación Bancaja se hace eco de todo ello en la exposición Valencia Jazz. Perdido Club y otras voces de una eclosión musical. Medio centenar de fotografías, diversos carteles, objetos, revistas, folletos, recortes de prensa y antiguas entradas a conciertos, conforman la crónica visual de toda aquella explosión jazzística.

Cartel de la exposición 'Valencia Jazz' en el Centro Cultural Bancaja.
Cartel de la exposición ‘Valencia Jazz’ en el Centro Cultural Bancaja.

“Casi se rompen las puertas durante una actuación de Stan Getz en el Teatro Principal”, recordó Jorge García, comisario de la exposición junto a Toni Picazo. El club Perdido, aglutinante del esplendor vivido esos años, tenía conciertos en directo cinco días a la semana, algo insólito no sólo en Valencia sino en el conjunto de España, según destaca una de las publicaciones que integran la muestra. Perdido abrió sus puertas en la calle Sueca del barrio de Ruzafa en 1980 y las cerró en 1995 asfixiado por la falta de ayudas.

En torno a esa intensa actividad del club Perdido gira la memoria visual de tan brillante época. “No es una exposición sólo de fotografía, sino el relato y la crónica del jazz que eclosionó en la ciudad de Valencia con la llegada de la democracia y los nuevos aires de libertad”, explicaron los comisarios. “Es la primera vez que el público va a tener la oportunidad de ver esa historia contada de manera visual”, subrayaron García y Picazo.

Video de la exposición 'Valencia Jazz' en el Centro Cultural Bancaja.
Video de la exposición ‘Valencia Jazz’ en el Centro Cultural Bancaja.

La exposición, más que un ejercicio de nostalgia, pretende rescatar aquel momento inolvidable con vistas a su proyección futura. De hecho, Jimmy Glass, desde 1993,  y Mercedes Jazz, una vez arrancado el siglo XXI, son fieles continuadores de aquel legado, por mucho que el esplendor se haya apagado. “No tiene el brillo de esos años, pero el jazz en Valencia sigue siendo un referente a nivel nacional”, aseguró Picazo. “Cada imagen y cada objeto de la exposición está pensado para narrar esa historia”, indicó García.

Imágenes de conciertos y festivales, ilustraciones de Daniel Torres y Micharmut, llamativos carteles, además del audiovisual que recoge la grabación de los seminarios de Bancaja en los 90, destacan la efervescencia vivida esos años dorados del jazz en Valencia.  Años que acogieron conciertos señeros, como los del citado Stan Getz, Dexter Gordon, Bill Evans, Chick Corea o Art Blakey, a los que hay que sumar los del Perdido, por el que pasaron Lou Bennet, Steve Lacey, Woody  Shaw, además de Pedro Iturralde, Tete Montoliu o Jorge Pardo.

Ilustración y fotografías de la exposición 'Valencia Jazz' en el Centro Cultural Bancaja.
Ilustración y fotografías de la exposición ‘Valencia Jazz’ en el Centro Cultural Bancaja.

Las fotografías de José Aleixandre, Pepe y Rafa Aparisi, José García Poveda, Antonio Porcar o Esther Cidoncha reflejan aquel brillo. “El jazz siempre ha tenido una imagen atractiva”, apuntó García. Atractivo no siempre correspondido económicamente. Como ha repetido en más de una ocasión el promotor Julio Martí, responsable del Festival de Jazz del Palau, el jazz para la industria ha sido maldito desde el punto de vista económico. Perdido Club aguantó 15 años hasta que la crisis y la falta de ayudas acabó con él.

Paralelamente a la exposición, el Centro Cultural Bancaja acogerá una serie de conciertos coloquio a cargo de Joan Soler & Ramón Cardo Quartet, el jueves 25 de febrero, Tino Gil & José Luis Granell Quartet (3 de marzo) y Steady Jazz Trio (7 de abril). Todo ello pensado para recuperar la memoria jazzística de aquellos años, al tiempo que pone en valor la escena todavía influyente del jazz en Valencia hoy día. Porque, como recordó Toni Picazo, “Valencia fue una referencia entonces y lo sigue siento todavía”. Según Jorge García, “quedan los 20 años posteriores que igual se pueden contar en otra exposición”. Continuará…

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Fotografía de la exposición de Bancaja.
Fotografía de Lou Benet por Pepe y Rafa Aparisi en la exposición ‘Valencia Jazz’ en el Centro Cultural Bancaja.

Salva Torres