Avelino Sala
‘Naturalezas muertas’, de Avelino Sala
Comisaria: Ana García Alarcón
Sala Dormitori
Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC)
Museo 2, València
Hasta el 11 de marzo de 2021

La Sala Dormitori del Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC) acoge, hasta el 11 de marzo, la exposición ‘Naturalezas muertas’, de Avelino Sala (Gijón, 1972), comisariada por Ana García Alarcón. El artista presenta, mediante una serie de piezas formalmente diversas, pero conceptualmente cohesionadas, “una revisión de cómo nos relacionamos con el medio natural”. Dentro del marco del arte político, Sala centra su crítica en la emergencia climática y el punto de no retorno en el que nos encontramos.

José Luis Pérez, director del centro, ha destinado esta sala a proyectos basados en la experimentación y la creación de universos creativos de último momento. García Alarcón afirma que este proyecto, en el que lleva trabajando conjuntamente con el artista desde hace año y medio, es una respuesta natural a la situación climática, atendiendo a sus “diferentes problemas, consecuencias y causantes”. Siguiendo la línea y la intención de Pérez Pont, el objetivo es invitar al espectador a pensar y observar la realidad desde otras perspectivas.

Avelino Sala lleva quince años dedicándose al arte político, entendido como crítica al contexto social. En su trabajo genera paralelismos entre las distopías y la realidad actual. Hay situaciones que, vistas a través de una pantalla o de un libro, tal vez nos impacten, pero siempre nos quedará el consuelo de los códigos de la ficción. Sin embargo, al analizar en profundidad nuestro contexto, vemos que no distan tanto la una de la otra. En palabras del artista, “vivimos una pesadilla distópica”.

Vista general de diversas obras de la exposición ‘Naturalezas muertas’, de Avelino Sala. Fotografía cortesía del CCCC.

La exposición está hilada por tres piezas. Un letrero de neón en el claustro renacentista que emite una señal de socorro. Con ‘SOS’, el artista saca una pieza fuera de la sala que sirve de reclamo. Una vez dentro, nos encontramos con una tabla de surf hecha con bronce, un material que de ninguna manera podría flotar. En su superficie, unas marcas de color azul vuelven a recrear la palabra ‘SOS’ en código morse. Cerrando la exposición, ‘El hundimiento/Prestige’, un vídeo documental donde el fiscal del caso Prestige habla de la catástrofe medioambiental que provocó el derrame del petrolero en la costa gallega en el año 2002 –caso paradigmático al ser la primera vez que se impuso una sentencia por delitos medioambientales en España–.

Entre estas tres piezas, otras muchas obras de Avelino Sala nos hablan del paisaje, de las voces que luchan en las manifestaciones de ‘Fridays For Future’, del amor entre las ruinas y de las condiciones de vida de un lugar destruido por las catástrofes naturales. Otro elemento recurrente en las piezas es el apropiacionismo del que Sala hace gala. Así, en ‘Sentences’, sobre unos paisajes en acuarela se pueden leer frases como ‘‘It’s Just a Matter of Time’’, de Félix González-Torres, o ‘‘Nature is Never Finished’’, de Robert Smithson.

Un instante del documental ‘El hundimiento/Prestige’, Avelino Sala. Fotografía cortesía del CCCC.

En ‘4’ 33’’ minutos de silencio’, la referencia a la obra de John Cage es evidente. En este caso, el artista construye un tríptico con pantallas de televisión donde se reproducen “minutos de silencio robados de los medios de comunicación”. Se trata, pues, de un homenaje a las víctimas. “Todos somos víctimas del cambio climático”. Ana García Alarcón afirma, al respecto, que “nunca se convoca un minuto de silencio por la naturaleza”.

Avelino Sala, a pesar de trabajar desde la crítica social, marca la diferencia entre el arte y el activismo: “El arte es una herramienta de debate y de conocimiento. El potencial político del arte invita a pensar desde otras perspectivas. Y habrá artistas cuyo interés les conduzca a implicarse de manera activa en la causa, pero hay que diferenciar la actividad artística y la social”.

Recalca, de igual modo, el equilibrio necesario entre estética y concepto. Es, precisamente, la estética la parte más visual del arte, la que consigue atraer a la gente y, en ese momento, entra el concepto en acción y se produce en el espectador un momento de reflexión. José Luis Pérez Pont, por su parte, reafirma el papel del museo en este proceso, ya que “la educación y la cultura son los pilares para generar un cambio en el pensamiento”.

Avelino Sala
Avelino Sala junto a su pieza ‘SOS’ en el claustro renacentista del CCCC. Fotografía cortesía del museo.

Elsa Moreno