‘Anna i la màquina del temps’
Teatro Principal
C / Barcas, 15. Valencia
Hasta el 21 de octubre de 2019

Viajar en el tiempo es un sueño compartido por personas de todas las épocas, tipo y edad. Un anhelo que ha inspirado infinidad de películas y series, incluidas obras dramáticas y literarias entre las que destaca la novela de H.G.Wells.  Según los vigentes parámetros científicos basados en la teoría de la relatividad de Einstein, trasladarse al futuro quizá sea posible, como demuestra las alteraciones temporales que experimentan los viajeros del espacio. Ahora bien, retornar al pasado es mucho más complejo. 

Es el dilema que sufre la protagonista de una obra que cosechó gran éxito la pasada temporada, Anna i la màquina del temps, repuesta en el Teatro Principal hasta el 21 de octubre. Nominado al Mejor Espectáculo Infantil y Mejor Escenografía en los II Premios de las Artes Escénicas 2019 del Institut Valencià de Cultura, esta producción del Escalante es un montaje de Dacsa Produccions sobre un texto de Manuel Valls, que acaba de llegar a las librerías en versión libro. Bajo la dirección de Cristina Fernández, integran el reparto: Laura Romero, Alejandra Mandli, Clara Crespo, Ramón Ródenas, el propio Valls, con la colaboración especial de Xavo Jiménez.

‘Anna i la màquina del temps’. Imagen cortesía del Escalante.

Anna es la hija de un científico viudo obsesionada con trasladarse al pasado para conocer a su madre, muerta al dar a luz. A partir de esa búsqueda de desarrolla una historia de aventuras y emociones que ahonda en la relación entre padres e hijos en clave fantástica e imaginativa. El uso de proyecciones sobre el escenario visualiza este viaje hacia el futuro.

“De la famosa novela de Wells se mantiene la idea de la máquina del tiempo y de una sociedad postapocalíptica, pero me basé también en la película de George Pal, El tiempo en sus manos”, dice Valls “Los personajes llamados Porgos tienen poco que ver con los Morlocks, los monstruos simiescos de la novela, aquí son más tecnológicos, algo que  nos daba más juego a la hora de utilizar el audiovisual. Además, el viaje de Anna es más visceral y es clave para entender la historia y la relación entre padre e hija”.

Anna tiene 12 años y es una gran amante de la lectura, una chica de carácter generoso más preocupada por cuidar a su padre que de sus propios deseos. “Una joven demasiado madura para su edad, capaz de ver y luchar contra las injusticias y ayudar a quien más lo necesite, ya sea su padre o sus nuevos amigos, los Números, una especie de humanos sometidos por unos seres superiores que les han quitado la capacidad de pensar”. 

‘Anna i la màquina del temps’. Imagen cortesía del Escalante.

El texto de Valls pone sobre el escenario esa lógica aplastante con la que los niños rebaten a los adultos que se equivocan, algo muy presente en la sociedad actual. “Los niños son animales políticos y que deben tener derecho a decir no cuando algo les disgusta. Ahí está Greta Thunberg. Los adultos tenemos más fuerza, los medios de comunicación, el poder. Pero ver a un niño luchar por su futuro, por el cambio climático, por lo que va a heredar y estamos destrozando sus mayores me parece un ejemplo brutal”. 

Anna i la màquina del temps reúne dosis de fantasía pero sin perder la conexión con una realidad. El equipo técnico lo integran: Luis Crespo, diseñador de la escenografía; Luis Perdiguero, encargado de la iluminación; Luna y Panorama de Insectos, responsables de la música; María Almudéver, diseñadora de vestuario y ayudante de dirección; y Jordi Alonso, Melissa Franch y Premier Frame, diseñadores de mapping. El texto, publicado por Obrapropia, reúne fotos del montaje y mensajes sobre las relaciones paternofiliales, del tiempo compartido y de cómo influye la tecnología a la hora de comunicar. 

Manuel Valls trabajó durante diez años como guionista de la célebre serie L’Alquería blanca. Cuando cerró Canal Nou, montó la productora Dacsa junto a Xavi Crespo y han creado varios espectáculos infantiles. “No nos podemos quejar pero desde que José Policarpo dejó el Escalante tenemos un sensación de vacío, de falta de visibilidad. He echado en falta una presentación pública del libro para darlo a conocer”, concluye el dramaturgo y actor valenciano.

‘Anna i la màquina del temps’. Imagen cortesía del Escalante.

Bel Carrasco