La ruta más corta
Día internacional del cortometraje
Granissat Estudi Creatiu
Calle Lepanto, 14, 46008 València
21 de diciembre de 2019

L’ Estudi Granissat de València acoge seis cortometrajes de animación durante el día más corto del año, en este caso, fue el sábado 21 de diciembre. De hecho, el festival recibe el nombre ‘El día más corto’ justamente por esta razón de coincidir con el solsticio de invierno.

Durante la velada, tanto los más pequeños como los propios adultos disfrutaron de una serie de cortometrajes de animación y diseño gráfico que pretendían educar en valores, divertir y, sobre todo, que todo el público encontrase la moraleja.

Niños y adultos disfrutando de la proyección de cortometrajes. Fotografía: Irene Valdés.

Desde personajes fabricados con cartón y papel, hasta otros diseñados con tecnología digital, se mostraron historias de todo tipo que dejaron a los más pequeños con ganas de más, y a los adultos, pensativos.

Entre sus autores encontramos a la directora Rosa Peris que, con su hermana, Mercedes Peris, dieron a conocer el proyecto que estuvo a las puertas de la nominación de los Goya, y en el que se aprecian los movimientos de sus personajes realizados con lápiz en combinación con herramientas de programas de edición y animación. En este cortometraje no hay diálogo entre personajes ni voz en off, pero simplemente, no la necesita, los bocetos y escenas que la componen hablan por sí solos, aparte de la música que acompaña y los efectos de sonido que la caracterizan.

Fotograma del cortometraje ‘Tututu’, de las autoras y hermanas Rosa y Mercedes Peris. Fotografía: Irene Valdés.

Otro de los cortometrajes, de Andreu García, bajo el título ‘La ballena y la gambita’, está realizado mediante materiales que podríamos encontrar cualquiera de nosotros por casa para hacer manualidades, y pretende enseñar varias lecciones. La primera de ellas, que con cualquier objeto o material, podemos crear un teatrillo; y que a pesar de que las personas seamos de una forma con determinado carácter, se puede cambiar y mejorar la actitud y comportamiento, y por último, que tu peor enemigo puede convertirse en tu mejor aliado y compañero de aventuras.

Asimismo, mediante el cortometraje perteneciente a Silvia Mañes titulado ‘Cazando gamusinos’, nos damos cuenta de que la familia es lo más importante y que, a pesar de que a veces tengamos que sufrir acontecimientos que no nos gustan, estando juntos siempre saldremos adelante. Mediante imágenes de animación, vemos como un niño intenta cazar gamusinos y, no solo eso, sino que también lucha contra ellos para poder recuperar el colgante que su padre tiene igual que él.

Por otro lado, ‘El camello Kabul’, de Andreu García muestra mediante materiales tan sencillos como lo son el papel, el cartón o el fieltro, entre otros, y con técnicas de papiroflexia, una buena cantidad de moralejas. Ejemplo de ellas es que cuando una persona se burla de otra lo hace por envidia o indiferencia; que cuando te propones hacer algo y lo intentas día tras día, consigues tu objetivo. Por último, también refleja la importancia de la familia, no solo en personas, sino también en animales, concrétamente en camellos.

Fotograma del cortometraje ‘El camello Kabul’, de Andreu García. Fotografía: Irene Valdés

Del mismo modo, en ‘Bita y Cora’, un corto de Vicente Mallols, se muestran niños, animales y extraterrestres, además de las nuevas tecnologías a través de personajes aparentemente hechos con plastilina. El objetivo de la protagonista es ir al planeta Ciruela para hacer nuevos amigos y explorar nuevos lugares, pero se quedan sin energía en la nave. Sin embargo, aparecen los “elms’’, de los que podemos decir que tienen luz propia, tanto literalmente porque brillan, como porque ayudan en todo momento a la niña a conseguir energía de una piedra preciosa, y se hacen amigos. Aquí vemos como un desconocido puede aportar inseguridad al principio, pero en cuanto te regala un poco de confianza, puedes considerarle una persona buena que te ofrece su ayuda sin pedirte nada a cambio. 

Mercedes Peris presentando el cortometraje ‘Tututu’. Fotografía: Irene Valdés.

Finalmente, inmersos en fechas navideñas, ‘Vs. Santa’, de Raúl Colomer y Aitor Herrero, fue la guinda del pastel. En este corto vemos como, en Nochebuena, una niña solitaria está jugando en su casa cuando descubre un regalo de Santa Claus. Al rechazarlo comienza una batalla con Santa, que intentará con todas sus fuerzas que la pequeña acepte un regalo. Tras el destrozo de toda la casa de la niña y la tristeza que siente Santa Claus, éste último le da el mejor regalo que ella podría tener: estar con su padre -que es piloto de avión- durante las navidades. Sin embargo, este acto tan aparentemente bonito… traerá consecuencias algo adversas, pues ¡es Santa quien pilotará los aviones!

Sin duda, el día más corto del año se hizo aún más corto, y eso sí: largo en didáctica, pues la gente de diversas edades pudo disfrutar de una actividad diferente que lleva aparejada una sonrisa. La recompensa llegó en forma de fuertes aplausos para los creadores de los cortometrajes.

Irene Valdés