#MAKMACine #MAKMAEntrevistas | Marc Ferrer y La Prohibida
‘¡Corten!’, de Marc Ferrer
Con La Prohibida, Samantha Hudson, Marga Sardà, Gregorio Sanz y Maria Sola, entre otros
78′, España | Películas Inmundas, Canada y Filmin, 2021
D’A Film Fest 2021

El cineasta underground barcelonés Marc Ferrer ha presentado en la reciente edición del D’A Film Fest su cuarto proyecto, ‘¡Corten!’, que cuenta con la coproducción de Películas Inmundas, Canada y Filmin. Un giallo marica actualizado que mezcla el terror con la comedia y en el que MAKMA ha tenido ocasión de adentrarse en compañía de su director y de la artista La Prohibida, coprotagonista del filme.

‘¡Corten!’ es puro metacine y Marc Ferrer la define como la historia de un director vampirizado por el cine que necesita hacer películas para sobrevivir, destacando una frase de su propio personaje que encaja a la perfección con este proyecto: “Las películas hay que hacerlas como sea”. La Prohibida, por su parte, elige la siguiente sentencia: “El amor es más frío que la muerte”, y piensa que las frases pueden hablar de una escena, pero no definir la película al completo.

Aunque ha sido perfilada como un giallo queer, ambos se postulan a favor de denominarlo de otra forma. La Prohibida insiste en que “la teoría queer es algo de gran importancia, pero tanto Marc como yo definimos la película como un giallo marica o un giallo LGTBI, y quiero que se utilice precisamente esta palabra en lugar de queer porque se deben usar palabras que realmente remuevan conciencias, como marica, maricón bollera o travesti; palabras usadas por muchos y de las que realmente conozcamos su significado”.

Cartel de ¡Corten!, de Marc Ferrer

Marc tuvo ocasión de ver el filme ‘Suspiria’, de Luca Guadagnino, en el Festival de Sitges de 2018, donde descubrió a Dario Argento y al giallo, con los cuales se obsesionó, y pasó los siguientes años investigado sobre más directores del género y viendo este tipo de cintas.

“En su época –recuerda el director–, estas películas fueron tachadas de misóginas por estar hechas, principalmente, por directores heterosexuales que cosificaban a la mujer, con mucho sexo gratuito y mucha violencia sobre ellas. Fue entonces cuando se me ocurrió la divertida idea de actualizar el género, darle una vuelta de tuerca y revertir la misoginia con altas dosis de homoerotismo. Quería que mi película parodiase el género y, a la vez, fuera un homenaje. El resto del universo que aparece es mi propio universo, mi realidad y surge todo con mucha naturalidad”.

En cuanto a sus influencias, Ferrer destaca el cine de Almodóvar y “la forma de dirigir a los actores en sus primeras películas, ya que en muchas ocasiones eran actores que no eran profesionales, contaba con sus amigos, y eso es algo con lo que siento conexión porque también apuesto por hacer mis películas rodeado de amigos y muchos de mis personajes están inspirados en estos”.

A la postre, una búsqueda de realismo, naturalidad y verdad que tienen mucho que ver con su manera de dirigir, y razón que justifica su predilección por elegir actores no profesiones. “La influencia de John Watters –cineasta al que rinde homenaje mediante el nombre de la productora (Películas Inmundas)– viene también por como el director trash dirigía sus primeras películas, las cuales se hacían con muy poco presupuesto y sin importar tanto el aspecto técnico”.

Hablando del elitismo que hay en el mundo del cine y en el arte en general, tanto Marc Ferrer como La Prohibida se manifiestan en contra de la dicotomía entre alta y baja cultura. En esta línea, el cineasta valora “lo que una película me trasmite, soy capaz de ver cosas que me encantan en una película considerada mala y encontrar muchas cosas que no me gustan en una obra maestra.” La Prohibida, por su parte, piensa que “el elitismo debería desaparecer” y que “se debe huir de esta idea. Para mí las películas cumplen una función distinta si entretienen, si te trasmiten algo o si simplemente las disfrutas”.

Ambos han trabajado juntos en otros proyectos. Para La Prohibida, “trabajar con Marc es algo divertido y agradable porque me trasmite tranquilidad como director”. Para Marc, trabajar con ella es “muy fácil; por ejemplo, en el videoclip ‘La Publicitá’, que yo dirigí. Es tan sencillo y cómodo trabajar juntos porque tengo absoluta libertad para crear; ella se adapta a todo y nos entendemos a la perfección, además de que nos divertimos juntos”.

En cuanto a las críticas negativas, estas son algo sobre lo que Marc Ferrer incide en ‘¡Corten!’, erigido como algo de lo que reírse –“me parece divertido leer las críticas negativas porque la gente tiene mucha imaginación para escribirlas”–, y acerca de las que La Prohibida manifiesta que, “en ocasiones, son una reafirmación. Es normal que no le gustes a todo el mundo –en concreto, a una cierta parte–; y eso no está mal, es lógico”.

Porque, tal y como matiza Ferrer, “hago un cine para un público muy concreto, con un bagaje que quizás muchos no tienen y acostumbrados a un cine al que no muchos están acostumbrados”.

Daniel Cámara