Casa Leibniz
Palacio Santa Bárbara
C / Hortaleza, 87. Madrid
Inauguración: martes 24 de febrero, a las 20.00h
Hasta el 1 de marzo, 2015

‘Casa Leibniz’ presenta obras de 17 artistas nacionales e internacionales: Pere Llobera y Diego Delas (de la galería F2); Daniel Steegmann (de la galería Murias Centeno); Felipe Talo y Xavier Mañosa (de la galería Alegría); Elena Alonso, Luis Vassallo y  Jorge Diezma (de la galería Espacio Valverde); Ana Barriga y Antonio Fernández Alvira (de la galería Espai Tactel); Andrés Pachón, Manuel Antonio Dominguez, Ignacio Bautista y Daniel Martin Corona (de la galería Ángeles Baños) y José Castiella, Saelia Aparicio y Salim Malla (de la galería Javier Silva).

Obra de Luis Vassallo, de Espacio Valverde, en Casa Leibniz. Imagen cortesía de los organizadores.
Obra de Luis Vassallo, de Espacio Valverde, en Casa Leibniz. Imagen cortesía de los organizadores.

‘Casa Leibniz’ reúne a un conjunto de artistas y galerías jóvenes en una exposición cuyo contenido, montaje y pensamiento invitan a la contemplación. Todo en esta exposición ha sido pensado para potenciar una de las cualidades más valiosas del arte: la capacidad de crear tiempo, otro tiempo.
A los artistas de esta generación (1975-1985) los suelen denominar ‘emergentes’, un término que no casa bien con un proyecto cuya voluntad, por el contrario, es descender a mayor profundidad.

Integrados en la exposición presentamos unos textos de Óscar Alonso Molina, Miquel Barceló, Estrella de Diego, Marcos Giralt Torrente, Germán Huici, Javier Montes y Enrique Vila-Matas cuya función no es explicar, sino provocar conexiones poéticas, filosóficas o literarias que amplifiquen los contenidos que emanan de las propias obra.

Obra de Pere Llobera, de F2 Galería. Imagen cortesía de los organizadores.
Obra de Pere Llobera, de F2 Galería. Imagen cortesía de los organizadores.

¿Porqué Leibniz?

En discordia con Newton, la teoría del tiempo de Leibniz afirma que sin materia no hay sucesos y sin sucesos no hay tiempo. En ese sentido las obras de arte, en la medida que son sucesos, fabrican tiempo, otro tiempo.

Pero fundamentalmente consideramos a Leibniz santo patrón del proyecto por la monadología: las mónadas son unidades metafísicas aisladas, que por gracia de la armonía preestablecida se coordinan y son capaces de constituir un universo. Así nos sentimos las galerías y artistas participantes aunque sin perceptible asistencia divina.

Obra de Saelia Aparicio, de galería Javier Silva. Imagen cortesía de los organizadores.
Obra de Saelia Aparicio, de galería Javier Silva. Imagen cortesía de los organizadores.

En Casa Leibniz cada artista ha sido seleccionado como una mónada de un conjunto armónico. Hay una filosofía secreta que envuelve esta exposición que se traduce en un modo de hacer particular. En ese sentido este proyecto se acerca al ideal de un matrimonio entre armonía y autonomía. Avanzamos juntos hacia una estrella.

Obra de Antonio Fernández Alvira, de la galería Espai Tactel.
Obra de Antonio Fernández Alvira, de la galería Espai Tactel.

Jacobo Fitz-James Stuart