El perro del hortelano, de Lope de Vega, dirigida por Helena Pimienta
Teatro Principal
C / Barcas, 15. Valencia
Hasta el 23 de abril de 2017

El Institut Valencià de Cultura presenta ‘El perro del hortelano’, de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, en el Teatro Principal de València, donde se representará hasta el 23 de abril.

Escrita por Lope de Vega entre 1613 y 1615, esta obra bebe tanto de la comedia palatina como de la comedia urbana. Se trata de una comedia única, con gran personalidad, que destaca por la construcción de los personajes,  por la belleza de sus parlamentos, así como por la originalidad de su estructura que narra una historia aparentemente sencilla, la de una mujer, Diana, condesa de Belflor, que se enamora de un hombre humilde, su secretario Teodoro.

El perro del hortelano, dirigida por Helena Pimienta. Imagen cortesía de Teatro Principal.
El perro del hortelano, dirigida por Helena Pimienta. Imagen cortesía de Teatro Principal.

«Hermosa, tierna, divertida, oscura, luminosa, vibrante, bruta, triste, alegre, aristocrática y popular, esta comedia nos atrapa desde el primer momento cuando vemos a esa mujer, Diana, luchando torpemente por salir de la cárcel de oro en la que ha sido encerrada», explica Helena Pimienta, directora de la obra.

El honor, la ilusión, la osadía, la ambición de ambos y el desengaño recorren su camino hasta el desenlace. Sobre el escenario, 14 intérpretes dan vida a Diana, Teodoro, Tristán y el resto de personajes de esta comedia: Rafa Castejón, Joaquín Notario, Marta Poveda, Álvaro de Juan, Óscar Zafra, Nuria Gallardo, Paula Iwasaki, Alba Enríquez, Natalia Huarte, Paco Rojas, Egoitz Sánchez, Pedro Almagro, Alfredo Noval, Alberto Ferrero, Fernando Conde. Les acompaña la música en off del piano de Olesya Tutova.

Lope obra el prodigio de componer una comedia labrada meticulosa y profundamente, mediante unos recursos espacio-temporales, de lenguaje y versificación, de contexto y de procedimientos serios, cómicos y fantásticos que la hacen navegar, unas veces, con enorme brío, otras con la calma y el lirismo de sentir, dudar, temer… atravesando los rincones más ocultos y humanos de la experiencia de la educación sentimental. El aprendizaje del amor se realiza en esta pieza con un obstáculo que se convierte en su significante: la diferencia de clases.

La versión, según su autor Álvaro Tato, pretende ser fiel a Lope, a la comedia y al teatro como arte del presente: «Todos los cambios, injertos y supresiones pretenden salvar los obstáculos del paso del tiempo sobre el idioma, para que el espectador pueda comprender cada verso sin perder el aroma de época y disfrutar a fondo de este divertidísimo viaje al laberinto de nuestros propios deseos».

El perro del hortelano, dirigida por Helena Pimienta. Imagen cortesía de Teatro Principal.
El perro del hortelano, dirigida por Helena Pimienta. Imagen cortesía de Teatro Principal.